Bueno quería exponer un tema que muy pocos saben, y que puede ser muy peligroso para la seguridad nacional de Chile, e incluso esto puede crear un Estado dentro de otro Estado, sin que los chilenos jamás se enteren de lo que pasa realmente. Durante la inmigración venezolana en lotes anuales que viene ocurriendo desde el año 2015 en adelante, con el gobierno de Bachelet, luego con el de Piñera, y el de ahora el gobierno de Boric. Se viene configurando algo muy peligroso para Chile. Chile es un país con una población de 18 millones en el año 2015, paradojicamente, esta inmigración aumenta vertiginosamente la población de Chile en casi 9 años, pasando de 18 millones a un apróximado actual de 21 millones y fracción. O sea hay más de 3 millones de personas en el país que llegaron en un lapsus de 9 años, y la mayoría son inmigrantes venezolanos, que traen algo, que nadie sabe, ellos están montando empresas y sociedades financieras o bancos en una especie de asociación ilicita, y hablo que ellos tienen decenas de millones de dólares en fondos para crear empresas financieras, donde se hacen préstamos de plata entre su colonia venezolana. Por eso ellos adquieren bienes de consumo o bienes de capital para iniciar sus empresas en Chile, de apoco comienzan acaparar empresas de servicios, compran vehículos, y están comprando propiedades, no es malo eso para un país, lo malo es que esos dineros son fraguados en un fondo de empresas bancarias ilegales que operan dentro de Chile, y que cada día aumenta su poder financiero. Estas sociedades mutualistas venezolanas comiencen apoderarse del mercado chileno de apoco y a competir con empresas medianas chilenas dentro del país. Ahora los venezolanos están viendo el mercado de bienes raices en Chile mediante la compra de terrenos y propiedades, y si ustedes creen que se irán están equivocados, el sistema chileno a ellos les conviene mucho más que el Estado Unidense, ya que este último esta lleno de regulaciones para los inmigrantes. De hecho si eres inmigrante ilegal en Estados Unidos, no te puedes atender en un servicio público, porque si te atienden ellos después avisan a inmigración para la deportación, y eso en Chile no ocurre, se pueden ir cuando ellos quieran. Vamos de mal en peor, porque los políticos le quieren dar derecho a voto, y eso pone otra condicionante, de que pueden comenzar a ejecer poder político, sabiendo que su cultura es muy diferente a la nuestra, pueden provocar alteraciones sociales, como políticas y económicas. Ahora quién va a pagar la cuenta de traer esta gente no serán los políticos o la gente rica de este país, será la ciudadanía. La única forma de sacar está inmigración peligrosa para Chile y que no se convierta un Estado dentro de otro Estado, porque su población se presume en 2 millones, es por medio de un líder o presidente con convicciones fuertes nacionalistas, como también la elección de una fuerza política nacionalista donde estarán diputados y senadores aprobando leyes para que esta gente deje de llegar a Chile y no darle ninguna ciudadanía hasta que se larguen el país a la buena o a la mala. Esto es una olla que puede estallar en cualquier momento porque esto no es una inmigración es un sabotaje a nuestra soberanía.
