Muy rico en la azotea, piso 20

No suelo escribir, ni mucho menos cosas de este tipo, espero les agrade. Soy una joven de 19 años, ni muy flaca ni gorda, caderas anchas con pechos normales, tan estándares como mi trasero. Mantengo una relación con un joven de 16 años (andantes) el practica boxeo por tanto tiene buen cuerpo, alto y duro por donde se le vea.

Para mí los lunes son hermosos (sin clases) así que ayer decidí salir con él a regalonear un rato a su departamento, estaba su mamá (almorzamos con ella, todo muy buena onda). El día marchaba normal, hasta que fuimos a comprar pan … debo admitir que la manera en que besa me mantiene caliente todo el rato, además que le encanta manosearme, que sumado a mi mala costumbre de vida sexual muy activa en mi relación pasada de casi tres años, me dan ganas de hacerlo con él en todos lados. Tomamos el ascensor y me dijo ¿Y si vamos al piso 20 cuando terminemos de comprar? Está bien- le dije- dejamos las cosas a su departamento y partimos al famoso pisito, para que estábamos con cosas, él estaba tan ganoso como yo, semanas antes hablamos el tema del sexo, con cuantos hemos estado y ese tipo de cosas, así que santo no era. Fuimos del piso 5 al 20 besándonos y tocándonos suavemente, era una especie de previa piola hasta con delicadeza diría, dejando la puerta del ascensor esperando abierta unos segundos, cuya acción complementaria fue una tomada de manos para salir hacia el pasillo.

Cruzamos la puerta (salida de emergencia), un estrecho pasillo aguardaba con no más de 10 escalones, subí cada uno pensando en lo excitante de hacerlo con la adrenalina de que nos pillaran. Tomé la iniciativa así que lo acorralé contra la pared y apegue mi cuerpo, lo besé como si no hubiera un mañana, me ofrecía su lengua y se la succionaba como si se tratara de su pene, nuestras respiraciones agitadas provocaban un eco en tan vacía sala que combinados con los besos en el cuello y agarrones intensos en mi trasero me mojaban todo el calzón, ahí fue cuando mi mano situada en el borde inferior de su espalda (tiendo a agarrar con fuerza, casi como un rasguño) se mueve hacia anterior cruzando su pelvis pero que no logra atravesar su pantalón pues tenía un cinturón más apretado que paté, así que saque mi mano rápidamente para reacomodarla en su paquete y se lo agarré con mi mano derecha en posición de cuando quieres beber agua, se lo sobaba con fuerza de arriba hacia abajo y le comía la oreja, entre mordiscos y mucha lengua.

Entonces, Él me toca por sobre el pantalón, acertó enseguida con mi clítoris, frotándolo en círculos y como loco, tan rico que me hizo dar pequeñas retorcidas de cuerpo y gemidos que llegaban directo a su oído. -Y si vamos afuera, así te oigo gritar más fuerte- me dijo, accedí y cruzamos una pequeña puerta (como las de hobbit) que nos llevó a la azotea, nos mirábamos a los ojos y nos reíamos de tan caliente que estábamos, así que al terminar de pararme enseguida me sube la polera y me desliza el sostén había abajo, destapando mis senos blancos, en cada mano un pecho que fueron agarrados de afuera y acercados al centro, estaban tan juntos que permitía comérselos por turnos, me mordía el pezón suavemente y su lengua oscilaba con potencia, mis ojos se cerraban y jadeaba de tan excitante lamida, entre tanto le agarraba su pene que estaba bien duro y parado, hasta que a lo lejos divise a una señora colgando una toalla en un edificio como de 40 pisos - Espera, espera, nos pueden ver , cambiémonos de lado- le dije, así que nos fuimos a otra esquina donde nos tapaba una pared pequeña … al llegar me dice, ‘’cata, siéntate, quiero probarte’’ entre mí dije, ya vale verga si me ensucio el pantalón, mataba por mi sexo oral, así que me baje los pantalones y el calzón, me senté y enseguida se arrodillo, sentí su lengua mojadita en mi clítoris, su chasquilla rosaba mi entrepierna que arreglaba con mis manos, le acariciaba su pelo mientras me metía dos dedos que llegaban al fondo de mi vagina, sentí además sus labios, que daban besos fuertes e intensos que me hacían empujar su cabeza contra mi sexo, provocándome gemidos que con mucho esfuerzo aguantaba, entonces se detuvo … y con los mismos dedos que me metió en la vagina me los introdujo a la boca, se los acepte y chupe de manera que deseara una mamada.

Me paré y le dije ‘’sácate ese cinturón’’, lo hizo sin pensar y le desabroche el pantalón bajándole también el boxer, muchachos menos mal ya había tanteado su pene, pues al verlo tenía un grosor que solo vi en pornos, y un largo normal, hermosa vista que tenía cuando me arrodillé. Comencé a hacer lo mío, chupadas suaves en el glande que eran acompañadas con mi mano bien firme sobre la base del pene, la cual movía su frenillo de arriba hacia abajo, luego de un rato empecé a introducírmelo de manera más profunda, trataba de comérmelo entero, pero era imposible, me faltaba un poco para que cupiera completamente, pues ya con la mitad me producían arcadas tremendas que le excitaban, ya que sus manos ejercían presión en mi cabeza como diciendo ‘’acércate lo más que puedas’’ , se lo hice como una verdadera amante del pene, se lo chupaba rápido y se lo agitaba con mi mano a la vez, no respiraba en el proceso, así que al detenerme a respirar en una de tantas me dice ‘’súbete arriba mío’’, nuevamente me valió tres hectáreas de verga ensuciarme, así que me saque un lado del pantalón y él se apoyó completo en el suelo, me subí y acomode su pene en mi vagina, y caí por gravedad suavemente, estaba demasiado mojada y fue tan exquisito sentir su grosor en mis paredes vaginales que estaba en el paraíso, con mis rodillas me impulsaba hacia arriba, rebotando y dándole besitos en su boca de manera tierna, hasta que subí la velocidad a tal punto que sentí el sonido de mi trasero rebotando en sus testículos, me hacía gritar como una loca mientras me agarraba los pechos acariciando un pezón y colocándome una cara de caliente (entre mordiéndose el labio) que les juro me hizo rebotar tan fuerte e inconscientemente que me rasmille las rodillas (quede con marcas y hasta me salió un poco de sangre) me cansé y me hizo acomodar mis piernas de manera vertical (apoyada entre sus hombros) pero manteniéndome arriba de él, su pene estaba al tope, enterito y delicioso dentro mío, que sumada a la potencia extraordinaria del joven llego a ser estruendoso el sonido del rebote, me hizo gritar como nunca, no sé de donde sacaba tanta potencia, era como si supiera que me gustaba el salvajismo en la cama, estaba que alcanzaba mi orgasmo hasta que se cansó, y sin decir nada me pare, y ofrecí mi vagina en la posición que la mujer esta de espaldas y él llega por detrás, no le costó introducir su miembro pues yo estaba que chorreaba de lo mojada, yo quería mi orgasmo así que le dije que se fuera pero que me diera tan duro como pudiera, se movía tan bien, tan fuerte y rápido que me volteaba a ver su cara despeinada y esforzada de penetrarme tan exquisito, mi cuerpo rebotaba entero y con las dos manos sostenía mis pechos, estaba apoyada en la pared mordiéndome el labio para no gritar tanto, le decía cosas como ‘’oh si cosita, que rico me das’’ ‘victor no pares’’ y así hasta que llegue a mi meta terminando en un largo grito de placer los cuales en pocos segundos dieron paso a la eyaculación de mi hombre. Al estar relajada sentí el semen calentito y un leve ahhhh que emitió dejándome totalmente satisfecha con la relación sexual.

Sacó su pene y me di vuelta, se lo miré y enseguida agrego ¿Te acuerdas que te dije que me corría mucho? Pues si me pudieses limpiar te agradecería mucho, cabros no les miento, se tuvo que tirar el cuerito del pene hacia adelante para que lo sobrante chorreara en el piso, era como una evidencia de crimen la posa que dejo, entonces me explico que la dieta saludable le provocaba mucho semen, yo igual sorprendida pues su semen era muy blanco y más liquido de lo normal, le di una chupadita para que no estuviera tan mojado y se lo guardo. Ambos quedamos temblorosos y nos fuimos caminando despacito, mirándonos de manera tierna y dándonos piquitos. Desearía repetir ese día, en que un cabro chico podría hacerme sentir placer tanto como un adulto.

Disculpen si quedo muy porno