NUEVA YORK -- Se ha sentido como una eternidad la última vez desde que los New York Knickssaborearon una victoria. Con un balance de 5-20 tras el triunfo que sellaron ante los Boston Celtics el pasado 12 de diciembre, dentro del camerino visitante hablaba Carmelo Anthony sobre como sentía "la sensación de ganar un partido de baloncesto" después de haber detenido una racha de 10 derrotas consecutivas. De todo modo, los Knicks todavía se sentían derrotados con la inesperada baja de Iman Shumpert, que se había dislocado su hombro derecho. Irónicamente, fue la última vez que jugaría con el conjunto antes de ser canjeado el 5 de enero. Desde ahí en adelante, Anthony y la escuadra de los neoyorquinos han caído como fichas de domino que se aplastan una contra la otra, sufriendo una cadena de 16 derrotas, que iniciaron en la duela local el 14 de diciembre ante los Toronto Raptors. Tristemente existe esta sensación de oscuridad y penumbra que se cernía sobre el equipo donde quiera que hayan jugado. Quizás deben ser el único equipo en la historia de la NBA que ha logrado lo insondable -- haberle sumado a esta racha de derrotas tres reveses en tres ciudades de tres países diferentes, el más reciente ante los Milwaukee Bucks el jueves pasado en Londres como parte del iniciativo de la serie de los Juegos Globales de la liga en el Reino Unido. Alternarán entre sus camisetas azules y blancas, pero la realidad es que esta nube gris seguirá sobre esa mítica cancha local que sigue siendo el Madison Square Garden y lejos de ella, donde han caído durante esta racha, ya sea en Los Ángeles, Chicago o Memphis, la ciudad que vio nacer al Rey del Rock, Elvis Presley, quien desde su tumba debiera estar cantándole al ritmo de los blues. La primera mitad, que le desarrolló la miseria de un balance de 5-36, podría ser algo del pasado pero en toda la actualidad será parte del presente. La segunda parte, que se iniciará la tarde del lunes en pabellón local donde no han ganado un partido desde el 22 de noviembre, solo reforzará esta decepcionante sombra que al final del día es parte del proceso, tan malo como pueda parecer, que ha creado el presidente del equipo, Phil Jackson, ante una afición que siguirá llenando el Garden noche tras noche. No será hasta el próximo 15 de abril, cuando celebren los últimos 48 minutos de esta pesadilla, que nerviosamente esperarán, masticándose las uñas, para que se determine su posición en la lotería del NBA Draft el próximo 15 de mayo, con la esperanza que se repita la suerte que tuvieron en 1985 cuando el entonces comisionado David Stern sacó un sobre de una tómbola, que en la opinión de muchos fue un regalo, y les entregó la primera selección que culminó siendo Patrick Ewing. Si el plan se lleva a cabo y eligen entren los primeros dos plazos del Draft, algún día mirarán hacía atrás y dirán que todo valió la pena. http://www.espn.com.co/news/story/_/id/2278729/knicks-en-un-interminable-viacrucis
Al parecer los Knicks son los Wolves del Este... Este año se ve a ambas conferencias bastante parejas, tanto en los primeros puestos como los últimos...
no sé, pienso que los knicks tienen un plan de mediano plazo. el próximo año tendrán muuuucho dinero para invertir, solo tiene que hacerlo bien y con jackson tengo confianza en ese sentido. En cambio Minesota... no tengo claro la razón de no asistir a los play off durante tanto tiempo si han tenido equipos aceptables y e incluso buenos
