David Jonathan Winkelman, un hombre de 48 años de edad, quiso ganarse un premio en efectivo cumpliendo con un reto promovido por la estación de radio KORB que al final resultó una broma. Escuchó claro el mensaje: "daremos una cifra con seis ceros a quien se tatúe el logo de la radiodifusora en la frente", publicó el diario inglés www.dailymail.co.uk. Rápido, le dijo a su hijastro Richard Goddard que fueran a "pintarse la piel" y después salir corriendo a recoger sus libras. Al salir del recinto del tatuaje, las palabras "Quad City Rocker and 93 Rock" relucían imponentes en la cabeza. Eran los reyes de Davenport, Iowa. Llegaron hasta la estación y exigieron lo que era de ellos, pero la realidad les pegó de lleno. Los directivos les dijeron que había sido una broma y por lo tanto no les pagarían nada. Los dos hombres, heridos en su orgullo, decidieron demandar. David y Richard argumentaron que al tatuarse el logo de la radiodifusora en la frente de forma permanente, "podrían ser ridiculizados y despreciados en público". Sin embargo, la querella fue desechada por un juez y el caso simplemente se quedó en anécdota. Nada se hubiera sabido, y mucho menos su gran error hubiera pasado de su círculo cercano, pero Winkelman fue arrestado el pasado jueves por cargos menores. Su foto pasó a los archivos y le dio la vuelta al país. Ahora, al par de sujetos ni siquiera les queda la resignación de ser la publicidad andante de la KORB, pues la estación cambió de nombre a KQCS Star 93.5. fuente:EFE
