Fantasma aterra a parroquianos del famoso Bar La Playa de Valparaíso

El rostro de una vaporosa y espectral niña, en una fotografía tomada en el famoso bar La Playa de Valparaíso, se ha transformado en un objeto de culto para muchos creyentes de lo paranormal y de los fantasmas, quienes aseguran que en el legendario local porteño suceden hechos inexplicables.
La foto fue tomada en el año 2001 por Pablo Alarcón (ver entrevista en recuadro) y desde que la reveló se ha creado toda una mitología en torno al "fantasma de la niña del Bar La Playa".
GARZÓN
Uno de los principales protagonistas de esta misteriosa situación es el garzón Miguel Balloqui, quien, a pesar de ser un escéptico en este tipo de temas, declara haber experimentado con clientes una serie de sucesos paranormales. Además, Miguel Balloqui es el protagonista de la famosa foto donde aparece el espectro de la niña.
"Ese día el fotógrafo me dijo que tenía que quedarme quieto y yo nunca vi entrar a alguien al sector de la barra", explica el garzón.
"Realmente yo no creo mucho en esas cosas, pero aquí pasan cosas raras. Lo más simple es que yo de repente dejo una jarra de vino o botellas de cerveza en un lugar y después están cambiadas y no hay nadie que las pueda haber trasladado", agrega.
NIÑA FANTASMA
Entre sus historias de fantasmas dentro del bar La Playa, hay algunas bastante impresionantes, que están relacionadas con estados de trance, lenguajes incomprensibles y mechoneos de pelo.
"Yo llegué a este bar el año 1993 y al limpiar un sótano encontramos osamentas humanas y restos de ropa muy vieja. Yo le conté a una fotógrafa francesa especialista en casos paranormales y me pidió que la acompañara hasta ese sótano. Cuando llegamos la mujer cayó en trance y empezó a hablar en un extraño idioma. Yo pensé que me estaban agarrando para el chuleteo, pero después me dijo que ella era una persona que captaba cosas y que ahí habitaba el espíritu bueno de una niña de seis años que habría muerto dramáticamente".
El relato continúa explicando que "otra turista también quería trabajar en el sótano y la llevé para que sacara algunas fotos. En un momento me dice: '¿Por qué me está tirando el pelo?', y yo le contesté que no la había tocado, que eso era una falta de respeto, y me explicó que había sentido claramente cómo alguien hacía bromas infantiles con su cabellera".
Con todas estas experiencias, Miguel Balloqui se empezó a preocupar y conversó con un gásfiter ya fallecido, que era uno de los parroquianos más antiguos del Bar La Playa.
"Él me contó que antes de la década del '50 falleció una niña, como de seis años de edad, y ella podría ser la niña de la fotografía, pero yo le insisto que soy incrédulo en ese tipo de cosas y siempre hay reflejos y cosas que alteran y transforman las situaciones".
Hay algunos rumores que hablan de un mozo fantasma en el Bar La Playa y de gente que en el local se aterra por situaciones extrañas; sin embargo el espectro de la niña, especialmente por la fotografía, es un hecho que ya traspasó las fronteras de la ciudad.
En Bar La Playa se pueden conseguir reproducciones en formato postal de la famosa fotografía y muchos turistas que visitan el local se la llevan de regreso a sus países y comentan que estuvieron muy cerca "del fantasma de una niña".

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