Cuando la cotidianidad, lo celestial y el deseo se juntan en una cocina aparece algo así como esto: una rubia para babearse y quizá persignarse del espectáculo divino que tenemos en frente. Se llama Kristina Mendonca, no es muy conocida, pero, de seguir así seguiremos viendo y escuchando más de ella. https://www.instagram.com/kristinamendonca/