Primer relato: Desde el carrete a mi casa. (parte 1)

Desde el carrete a mi casa (P1)​

Hola a todos, este es el primer relato que escribo, espero que les guste.

Es bueno siempre comenzar con la descripción de uno mismo, para que todo sea mas fácil hacía adelante. Tengo 24 años, estudio una carrera ligada al área de la salud, no me reconozco a mi mismo como un tipo de buen físico, pero no me va mal con el género femenino, y la historia que les voy a contar es bastante reciente, de hace un par de semanas.

Era viernes, y como cualquier otro me disponía a salir a carretear, me gusta hacerlo en casa de amigos, sobretodo por el ambiente que se genera, la posibilidad de conversar, tomar un par de copetes y fumar algo, para distraer las neuronas. El carrete era en la periferia de Santiago, yo vivo en un lugar céntrico, por lo que el devolverme a mi casa no me es difícil de casi ninguna parte de santiago.

Llegué a eso de las 10 de la noche, aún no llegaba nadie, solo estábamos ahí una pareja de amigos de la universidad, y una compañera de mi carrera, con la cual eramos cercanos, por lo que comenzamos tomándonos un par de cervezas, en un ambiente muy tranquilo y distendido. Con el pasar del rato comenzaron a llegar más personas, otros amigos, casi todos conocidos de la vida que nos juntábamos para conmemorar alguna festividad inventada, con la excusa de reunirnos. Sin embargo dentro de todos esos amigos llegó un mujer que no conocía, y que si bien al principio no llamó mi atención, si lo hizo con el pasar de la noche, sobretodo luego de ofrecerle una quemada y quedarnos conversando de casualidad. Ella era de tez blanca, ojos almendrados color verde, pelo liso y negro que le llegaba a la cintura, una contextura delgada pero tonificada, un culo grande, de esos que dan ganas de comerse, y unas tetas, que si bien no eran grandes, sentaban a la perfección con su cuerpo. Entre cervezas y más quemadas nos fuimos adentrando en una conversación bastante profunda, pero a la vez espontanea, la cual iba acompañada de más y más frases que me hacían pensar que esa noche me iba a devolver acompañado a mi casa.

Un amigo, ya arriba de la pelota, nos hizo el favor de incitarnos a bailar, con lo cual siguió el coqueteo anterior, ella se movía increíble, y entre mas bailábamos, mas se nos subía la calentura a la cabeza. En un momento, cercano a las 4 de la mañana, paramos un poco de bailar, y jugandomela completa le dije que porque no terminabamos de bailar en un lugar más privado, la conversación fue más o menos así:

Yo: (...) Creo que ya no quiero seguir bailando acá... Te parecerá quizás un poco arriesgado lo que te voy a decir, pero creo que entre nosotros hay una onda muy buena, y me gustaría que termináramos bailando en otra parte.
Ella: Ah si! Y donde te gustaría seguir bailando?
Y: (Me tiré con todo) Que te parece en mi casa, vivo solo en "X" dirección, podríamos ir allá, tengo un poco de hierba y vino, quizás podríamos terminar (Teniendo sexo salvaje) de una manera más relajada y piola la noche...
E: (Con cara de querer y entender para donde iba la micro) Lo voy a pensar ah, bailemos un poco más a ver si me convences.

Luego de decirme esto yo me serví otra piscola y le di con todo, creo que nunca antes en mi vida había bailado con tanto empeño y de manera tan calentona con alguien, lo único que pensaba en ese momento era en ponerla y calentar a esta mina desde ya, cosa de que ella me deseara igual que yo la deseaba a ella. A eso de las 5 de la mañana me pregunta si la propuesta seguía en pie, yo le dije que obvio, y que si quería nos podíamos ir en taxi a mi casa, y que se quedara a dormir ;allá, a lo que accedió, así que pedimos un radio taxi y nos fuimos a mi casa.

Llegó el taxi y nos subimos, pasó un rato sin decirnos algo, cuando la miro y veo que me agarra la pierna y me mira mordiéndose el labio, a lo cual no aguante más y me lancé, ella respondió de la misma manera, lo primero fue un beso largo, yo pasaba mi lengua por sus labios, mientras sentía que su respiración comenzaba a aumentar, ella tenía aun su mano sobre mi pierna, así que puse la mía sobre la suya y comencé a subir por su brazo, su hombro y finalmente su cuello, acariciándolo y agarrándolo de vez en cuando. En cambio ella ya había movido sus manos de mi pierna, y la tenía puesta sobre mi abdomen y comenzaba a agarrarme la ropa y a meter su mano por debajo de ella. Así seguimos un buen rato, sin tocarnos más allá de lo que antes dije.

Cuando llegamos a mi casa, saludamos en portería y subimos el asensor, ya la propuesta de vino y hierba se había ido a la mierda, lo único que quería era desvestirla y disfrutar de esa mujer completa. Atravesamos el umbral de la puerta, yo primero y espere que ella pasara para cerrarla, en cuanto la cierro me doy vuelta y ahí comienza lo bueno...

Yo: Aquí cagaste...
Ella: Ah si? Por qué sería?

En cuanto ella dice eso la agarro por la cintura y comienzo a besarla de manera muy apasionada, bajo mis manos hasta sus nalgas y con mucha fuerza y rápido la subo a la mesa de la cocina (mi departamento es bastante pequeño, por lo que cocina, comedor, living, terraza es todo una sola cosa) y aquí comienzo a darle besos en su cuello, de manera muy intensa, mi lengua pasa por todo su cuello, de abajo hasta arriba, mientras mis manos suben por su espalda, por debajo de su ropa, cuando llego a la altura del sostén lo suelto, y comienzo a tocar sus tetas, que delicia, suaves, delicadas, cada vez que pasaba por sobre sus pezones ella daba suspiros de placer, muy cortos y ahogados. Comienzo a desvestirla, le saco la polera que llevaba puesta y los sostenes, y quedan sus tetas frente a mi, unos pezones rosados y parados, que me hacen besarlos y chuparselos de inmediato, comienzo a pasar mi lengua en la aureola de sus pezones, para luego pasar mi barba y mi lengua por encima de ellos, sus gemidos ahogados comenzaron a escucharse, su respiración aumentó y su vagina se estrellaba contra mi cuerpo, esperando encontrar mi pene, el cual estaba muy duro.

Luego de un corto, pero intenso pasar por sus tetas, me dispuse a bajarla de la mesa, y hacer que apoyara sus senos sobre ella, mientras yo me agachaba y descendía sus pantalones, para ver se culo perfecto con una lencería de encaje que solo mejoraba el como se veían sus nalgas, moví el colaless hacía el lado y vi ese ano y esa vagina exquisitas que me esperaban, no me aguanté más, la abrí de piernas bruscamente y comencé a lamer su vagina y clitoris, en cuanto puse mi legua sobre ellos, ella soltó un gemido largo y exquisito, y eso solo me calentó más, por lo que cada vez lo hacía más rápido, pasando mi lengua de abajo hacía arriba y metiendo dos de mis dedos dentro de vez en cuando, sus gemidos y contorsiones eran exquisitas se movía al compás de mis dedos, finalmente me arriesgué poniendo un dedo sobre su ano, a lo cual solo gimió mas fuerte.

Y: Te gusta esto? te gusta que te chupe tu vagina, mientras te acaricio el ano?
E: Si, me encanta, sigue así, no pares, sigue, sigue, sigue...

Comencé cada vez más rápido, y mas fuerte, mis dedos sonaban adentro de su vagina y de su ano, y mi legua estaba posada sobre su clítoris, cuando comienza a gritar y a pedirme que no pare, que no pare, a lo que suelta un gemido muy largo y comienza a contorsionarse sin dejar de gemir, ya no podía mantenerse en pie del orgasmo que había tenido...

Espero que les haya gustado, esta es la primera parte de dos, estoy abierto a cualquier crítica o comentario. Saludos a todos!

 

Gracias por los comentarios! Se viene luego la segunda parte