En el camino quedaron Mauricio Olivares y Adriana Barrientos, quienes se convirtieron en un interludio de la historia sentimental entre la argentina y Posada, ya que la pareja que había pololeado largo rato antes de hacerse conocidos, decidió comenzar todo de nuevo. Parejas que empiezan, parejas que terminan, esa es la tónica de nuestra farándula por estos días. Manutomatoma termina con Luli y empieza con una chica todavía desconocida. Barrientos termina con Josito y empieza algo con Neira. Josito termina con la modelo y comienza nuevamente con Albasetti. Y así podemos seguir por largo rato. Pero claro, es esta última pareja la de turno, porque recién anoche la argentina de 1810 reconoció que nuevamente era pareja de José Miguel Posada. Habían pololeado un buen tiempo incluso antes que Eliana se convirtiera en un personaje conocido. Terminaron amistosamente y luego cada uno siguió con lo suyo. Ella conoció a Mauricio Olivares y él a Adriana Barrientos. Cada uno tuvo breves pero mediáticas relaciones, y finalmente todo terminó en pelea. Josito todavía alega que a la Barrientos le bajó el pelo metiéndose con un futbolista y mandando mensajitos a los panelistas de farándula, se jactaba de que ahora ya nadie le compraría productos Louis Vuitton a la maniquí. Por su parte, Albasetti finalizó su relación con Olivares a punta de descalificaciones, en las que se hablaba de deudas económicas y patudeces varias relacionadas a un departamento que arrendaba la trasandina. Sin duda, un verdadero circo de dimes y diretes, peleas y reencuentros, que hoy tienen a Posada y Eliana juntos de nuevo. Está todo bien, nos separamos un buen tiempo y cada uno tuvo otras cosas, pero nos dimos cuenta que siempre hubo algo, explica feliz la ex princesa de Amor Ciego 2. De hecho, el viernes en Planet TV todo estaba semiarreglado para que la pareja se presentara nuevamente en sociedad. Había trascendido que terminado el desfile de Eliana y Camila Sanhueza en ese local nocturno, Josito aparecería al final a buscar a su polola. La prensa rosa esperaba ansiosa esta imagen actualizada del antiguo pololeo, pero finalmente Albasetti llamó a Posada y este le pidió por favor cambiar los planes. Así, la modelo extranjera tuvo que partir por su cuenta
