Se disfrazó de pene, irumpió en una graduación y echó a correr.

Se disfrazó de pene, irumpió en una graduación y echó a correr. Ahora, el estadounidense Calvin Morett ha sido condenado por un juez a disculparse públicamente.

Los vecinos de Saratoga Springs celebraban con la seriedad que suelen los estadounidenses la ceremonia de graduación de sus muchachos, aplaudiendo cada vez que uno de ellos recibía el diploma de manos de sus profesores. Numerosas cámaras de vídeo captaban el momento, multitud de ojos atendían a los pasos que el ser querido de turno, apretado el birrete sobre la cabeza, daba hacia su nueva vida.

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Esos centenares de ojos debieron abrirse como platos cuando un enorme pene apareció sobre el escenario donde se desarrollaba el acto y, con paso firme y decidido, avanzó a la carrera entre los graduados entre gritos y alguna que otra risa.

Pero entre esos centenares de ojos estaban los de muchos padres indignados, por lo que la intervención de Calvin Morett, protagonista de la polémica acción, fue llevada inmediatamente a los tribunales.

Ahora un juez ha ordenado al joven de 19 años que publique una disculpa pública dirigida a la ciudad de Saratoga Springs por disfrazarse de pene. Además, Morett, que se declaró culpable de los hechos, tendrá que realizar 24 horas de servicio comunitario y pagar las costas del juicio.