Una mujer neozelandesa ha vendido por casi 2.000 dólares neozelandeses (unos 1.030 euros) dos frascos que según ella contenían los fantasmas de un anciano y una niña , tras una reñidísima subasta en Internet, informaron medios locales. Avie Woodbury, de Christchurch, dijo a TVNZ que capturó a los espíritus tras una sesión de exorcismo en su casa por la que pagó unos 100 dólares. Woodbury metió a continuación los fantasmas en agua bendita y los almacenó en frascos separados antes de decidir subastarlos. La web en la que se vendieron atrajo más 200.000 visitas antes de que la subasta finalizara el lunes después de una semana. Woodbury dijo que todo lo recaudado en la subasta, excepto la tarifa del exorcista, se donarían a una organización benéfica de animales. "Me pasaban cosas como que la jarra se pusiera a hervir por sí sola, me tocaran en la nuca, voces en otras habitaciones, y las cosas desaparecían y aparecían en lugares extraños", declaró. "Simplemente me quería deshacer de ellos porque me dan miedo. Pero alguien podría quererlos para jugar", declaró. Woodbury dijo que sintió una mejor energía en su casa tras el exorcismo. "No sé si es psicológico o no, pero definitivamente sentí una nueva vibración en la casa", declaró a TVNZ. La puja ganadora procedió de una compañía de cigarrillos electrónicos, que según periódicos locales está pidiendo ideas para saber qué hacer con los frascos. pd: hay gente tan credula en este mundo