Viaje con amigos

Tema en 'Relatos Eróticos' iniciado por macosuno, 26 Jun 2018.

  1. macosuno

    macosuno Usuario Nuevo nvl. 1
    62/82

    Registrado:
    28 May 2017
    Mensajes:
    41
    Me Gusta recibidos:
    26
    Hola a tod@s, quisiera contarles una historia que me pasó hace unos años atrás, aunque es la pura y santa verdad, hay cosas las cambié para proteger identidades y demases...

    Fue en el verano del año 2015, en un viaje con un grupo de colegas al litoral. Era un grupo numeroso y mixto, buena onda todo, a pesar de que andábamos con dos jefes... Entre ellos estaba una colega, a quien le vamos a decir Daniela. Una rubia alta, ojos marrones brillantes, unos labios finos, de pechos y trasero del tamaño justo, pero lo mejor su personalidad reservada y coqueta.

    El asunto es que íbamos por unas semanas, y como igual queríamos divertirnos, organizábamos asados en el lugar donde nos estábamos quedando y también íbamos en grupitos al único pub que había ahí.

    Cuando llevábamos como 3 o 4 días creo, no lo recuerdo bien, fuimos al pub, ahí había karaoke y entre todos cantábamos y la pasamos bien. Pero cuando estábamos en eso, me empecé a acercar a Daniela, y entre cantar, bailar y beber, me puse detrás de ella y le empecé a rozar su trasero con mi miembro... Todo eso ahí frente a todos. Yo creia que no se notaba, así que yo continuaba, y lo mejor de todo es que ella se dejaba, porque parece que le estaba gustando tenerme detrás, le tomaba "sin querer" las caderas y ya se me había endurecido y calentado muchísimo.

    Despues de un rato en eso, la Daniela salió del pub a fumar y obvio, yo la seguí. Afuera se sentó como en una banca de cemento un poco alta (obviamente la tome de la cintura para subirla, hay que ser caballero), y yo me puse de frente a ella, y comenzamos a conversar. Rápidamente vi que no hubiera ningún colega cerca y le di un beso, ella me respondió y empezamos a besarnos como locos. Luego nos movimos un poco más hacia una esquina, a un lugar oscuro al lado del pub para que no nos vieran, y ahí continuamos besándonos y también a tocarnos, ahí en plena calle!!!

    Comencé por agarrarle su trasero, que como dije esta muy bien puesto, ella gemia y yo me puse como un animal. Le besaba su cuello mientras la tocaba por todas partes, sus pechos, su cintura, sus nalgas. Continuaba con sus tenues gemidos y se entregaba entera, dispuesta a darme todo para saciar mis instintos más inmorales, y yo recibiendo gustoso su cuerpo, ofrecido tan generodamente.

    La sensación fue indescriptible cuando comencé a tocarla bajo su ropa, a pesar que esa noche estaba muy fría. Tras su polera, sus sostenes, y bajo ellos, encontré unos lechos que hasta el día de hoy los recuerdo con perversion. Yo continuaba besandole el cuello, y sus pequeños gemidos prendían aún más el fuego de pasión. Recuerdo que estaba totalmente entregada, ella no atinaba a tocarme a mi, solo se limitaba a abrirse para mi, ofreciéndome su cuerpo de tal manera, que la lujuria era lo único que se respiraba.

    Pero este primer encuentro no llegaba hasta el momento más sublime. Mientras continuaba saciando mis instintos más inmorales, saboreando su carne, tomé una mano de la Dani y me lleve al pantalón, adentro del pantalón, e hice que también disfrutara de mi cuerpo, de mi sexo. La irrigacion sanguínea hizo que mi pene estuviera muy muy duro, y cuando la mano de mi amante llegó a su destino, un gemido de placer y locura salió de su boca, comenzando a recorrer mi glande húmedo, para luego recorrer mi virilidad en toda su extensión, alcanzando incluso mis testículos. Al mismo tiempo, yo me zambulli en su húmeda entrepierna, se abrió levemente y yo pude continuar disfrutando de mi hembra, eramos dos animales, dispuestos a aparearse en plena calle, sin importar modales ni decencia.

    Sin saber muy bien como, tuvimos una ventana de moralidad y pudor, deteniendo nuestra lujuriosa aventura por el momento, justo cuando nuestros colegas finalizaban la velada de karaoke. En grupo nos devolvimos al lugar de estadía, para luego irnos a acostar en piezas separadas hombres y mujeres (trabajo es trabajo).

    Esa noche no ocurrió nada más, pero fue el inicio de una hermosa amistad, la cual siempre ha estado mezclada con lujuria. Pronto los relatare la noche en que nuestros cuerpos se unieron en uno, cuando yo bebí de su sexo y ella del mío.
     
    A Georgeiqq, hector69 y oliver27 les gusta esto.
  2. hector69

    hector69 Usuario Casual nvl. 2
    62/82

    Registrado:
    7 Jun 2017
    Mensajes:
    714
    Me Gusta recibidos:
    260
    Ta weno esperando a cachar las maromas de la dani