Blurred Lines de Robin Thicke es por lejos una de las canciones del año, además de ser una prueba empírica de que los buenos sonidos siempre vuelven. Claro, no se puede negar el parecido de esta canción con Got to Give It Up de la leyenda Marvin Gaye de 1977, o con Sexy Ways de Funkadelic. Estos parecidos o inspiraciones, ¿serán suficientes para que se meta en problemas judiciales? Según el Hollywood Reporter, Thicke, Pharrell y T.I., intérprete y colaboradores respectivamente, estarían enfrentando próximamente una batalla judicial con la familia del fallecido Marvin Gaye y con Bridgeport Music, quienes manejan los derechos de la música de Funkadelic. Los demandantes, que tienen el máximo respeto y admiración por Marvin Gaye, Funkadelic y su legado musical y presentan a regañadientes esta acción frente a múltiples suspicacias de los presuntos sucesores de los intereses de los artistas. Los representados siguen insistiendo que la masiva y exitosa composición del demandado, Blurred Lines, copia su composición, establece la demanda. La canción ha sido número 1 en 14 países y ha tenido un éxito increíble. Acá está el tema en disputa y sus dos inspiraciones para que opines.
