¿Maldición o coincidencias? 10 datos de la tumba de Tutankamón

“La muerte golpeará a quien turbe el reposo del faraón” rezaba una leyenda que encontró Howard Carter en la antecámara de la tumba de Tutankamón, el 5 de noviembre de 1922…

Carter era un egiptólogo inglés que llevaba más de 15 años trabajando en prospecciones arqueológicas en Egipto, pero lo motivaba una vieja obsesión. Encontrar la tumba de un desconocido faraón de la dinastía XVIII, de quien tenía sólo una referencia: un anillo en el que leyó por primera vez su nombre: Tut-Ankh-Amun, que traducido equivale a “más que nunca está vivo Amon”.

Cuando logró ser financiado por Lord Carnarvon, Carter comenzó la búsqueda que los llevaría a la fama, pero no sólo por el hecho de haberla encontrado, sino por las trágicas muertes que desencadenó, y los misterios que se ocultaban ahí dentro.

Tanta ha sido la importancia y el enigma detrás de esta tumba y de la vida del “faraón niño”, que incluso se han hecho películas y series televisivas, siendo la más reciente una miniserie que se transmitirá por History Channelel 4, 5 y 6 de noviembre.


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Además, recientemente se confirmó que a partir del 5 de noviembre, se comenzará con la búsqueda de Nefertiti en la tumba de Tutankamón, pues según la teoría del egiptólogo británico Nicholas Reeves, en ese sepulcro podría estar también enterrada quien fuera su madrastra.




En cuanto a la famosa maldición, se sabe que para 1929, unas 16 personas relacionadas con Carnarvon o Carter fallecieron y de inmediato la prensa sensacionalista comenzó a hablar sobre la maldición de Tutankamón...


El hallazgo


Fue el 5 de noviembre de 1922 cuando el egiptólogo Howard Carter y su equipo, descubrieron los escalones que descendían hasta una puerta que aún mantenía los sellos originales, en el llamado Valle de los Reyes.



Las advertencias


“La muerte golpeará a quien turbe el reposo del faraón” decía una leyenda que se encontró en la antecámara de la tumba de Tutankamón. Cuando se destapó el sarcófago,un amuleto lanzó una nueva amenaza: “Yo soy quien ahuyenta a los profanadores de tumbas.Yo soy el que custodia la tumba de Tutankamón”




Tutankamón


Según la investigadora Salima Ikram,se encontró la momia de Tutankamón sin corazón,pudiendo aludir a la muerte del dios Osiris;con el pene erecto momificado,que podría ser símbolo de la fuerza regenerativa del mismo dios;y cubierto con una sustancia negra,empleada para oscurecer la piel del faraón.



La primera muerte


Fue la noche del 4 de abril de 1923.Lord Carnarvon,quien financió la excavación y estuvo en la tumba,falleció a causa de neumonía fulminante,detonada por la picadura de un mosquito.A la hora de su muerte en el Cairo hubo un gran apagón que dejó a oscuras la ciudad y,en Inglaterra, su perro falleció.





Para abonar el terreno a las coincidencias, al proceder a la autopsia de la momia se encontró que justo donde el mosquito había picado a Lord Carnarvon,Tutankamón tenía una herida. El suceso comenzó a ser uno de los favoritos de la prensa, por lo que se le comenzó a llamar “La Maldición del Faraón”.




La maldición comienza a tomar forma


Los rumores siguieron creciendo cuando otros trabajadores que habían participado en la excavación, murieron sorpresivamente: Audrey Herbert, que estuvo presente en la apertura de la cámara real y que murió inexplicablemente en cuanto volvió a Londres.



Arthur Mace, el hombre que dio el último golpe al muro para entrar en la cámara real, murió en El Cairo poco después, sin ninguna explicación médica. También Sir Douglas Reid, que radiografió la momia de Tutankamón, enfermó y volvió a Suiza donde murió dos meses después.



La secretaria de Carter murió de un ataque al corazón, y su padre se suicidó al enterarse. Un profesor canadiense que estudió la tumba murió de un ataque cerebral. Richard Bethell, que había ayudado a Carter a clasificar el tesoro, murió a los 49 años de edad, al parecer se suicidó.



Meses después, su padre, se quitó la vida en Londres, al arrojarse por la ventana. En su dormitorio tenía un jarrón procedente del sepulcro de Tutankamón. George Jay Gould, se trasladó a Egipto para ver el lugar con sus propios ojos. Murió de neumonía después de resfriarse tras visitar la tumba.




El misterio no sólo rodea a Tutankamón, sino a todas las momias egipcias


En 1912, el cuerpo embalsamado de una pitonisa egipcia era trasladada de Inglaterra a Nueva York, pero jamás vio concluida su travesía pues el buque en que era trasladada chocó contra un iceberg. El buque en cuestión no era otro que el famoso trasatlántico mejor conocido como Titanic… ¿Coincidencia?

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