El Muchacho de la Mirada Misteriosa (Parte 1)

Hola, soy Javi. En esta historia soy una mujer de 23 años, mido 1,68 cms y siendo bien sincera y franca con ustedes, mi cuerpo está ejercitado puesto que entreno a menudo. Me gustan mucho mis piernas porque gracias al entrenamiento tengo mi potito bien paradito y firme, algo que a los hombres les fascina según mi experiencia. No tengo mucho busto, pero no es problema para mi vida sexual. Tengo unos labios carnosos, soy pecosa y mi cabello es de color negro. No tengo ninguna muralla para conversar sobre cualquier tema referente al sexo, en realidad me gusta mucho compartir experiencias con mis amigas e incluso mis amigos que me usan como psicóloga para darles consejos amorosos jaja.

Este es mi último año de carrera, me ha ido súper bien en los ramos (no me he echado ninguno) y he conseguido aprender muchísimo a lo largo de mis estudios. En realidad este año resulta ser uno de los más importantes de mi vida, debido a que por fin tengo mi licencia y bueno, el título llega más tarde jaja, pero el día de hoy puedo decir con certeza que soy toda una profesional lo que me alegra bastante.
Resulta que me ofrecí nuevamente como ayudante de un profesor para ganar dinero y seguir avanzando con mi tesis. Me faltaba mucho por agregarle y tenía varias correcciones por añadir todavía, así que ahí fui trabajando con ese profe semana a semana.
Pero no vengo a contarles una vivencia con este profe jaja, para nada. Lo que ocurrió fue lo que menos me esperaba que pudiera llegar a suceder a esas alturas.
Mientras estaba de ayudante en las primeras clases, me tocó atender a un curso de 2do. año. Los chicos recién venían llegando de vacaciones luego de pasar su primer curso y algunos estaban motivados por seguir en la carrera. Si bien había bastantes chicos y chicas que eran muy aplicados, había uno que me llamó la atención desde el inicio. Y no fue por su físico ni nada de eso, sino que de verdad me encantó su manera de ser. Era súper educado, inteligente y no parecía ser de esos que andaba calentando el asiento. Fuera de eso, tenía una sonrisa muy tierna y una mirada bastante dulce.
El punto fue que como yo era la ayudante y mucho más mayor, decidí comportarme como lo que era, simplemente la ayudante. Así que fui atendiendo a las dudas que fueran teniendo los demás y las cosas se fueron dando con la clase a medida que fue avanzando el tiempo.
Apenas era Marzo y yo me había inscrito en el taller de básquet para tener algo en donde desestresarme durante las tardes y de igual forma iba al gimnasio para poder ejercitarme, ya saben. Resulta que un día, mientras estaba en básquet, me topé con la sorpresa de que este chico al que llamaremos "Jano" estaba en el gimnasio junto a la cancha haciendo ejercicio con uno de sus compañeros supongo.
Preferí concentrarme y en un momento lo pillé mirándome junto con su compañero jaja, levanté la mano para saludarlos y el otro chico se puso nervioso de una menos él, tal vez mi sonrisa no fue suficiente para él jaja.
Seguí entrenando hasta que acabó el taller y en cuanto me fui a la salida me encontré con estos niños. Les pregunté si iban a ir a la bienvenida mechona, porque se acercaba el día y habría harta fiesta jaja, ellos dijeron que sí, así que seguramente nos íbamos a ver. Pero en fin, me largué a mi depa para ducharme y ponerme a trabajar porque como sabrán, esa tesis no se iba a avanzar sola.
Llegó el día de la bienvenida y Jano no apareció. O al menos nunca lo encontré, porque una como mujer igual se fija un poco o no? jaja Somos como el FBI.
Allí me junté con Cata y Rut y nos pusimos a bailar con la música a todo volumen que tenían jaaja igual me acordé de mi época como mechona, había pasado demasiado tiempo de aquello y me dio la nostalgia un poquito.
Los días fueron pasando y mi relación con los chicos del curso de 2do. fue mejorando bastante. Yo era como la compañera buena onda y simpática. Sabía mucho sobre el ramo y ellos me veían como una buena amiga si obvio, ¿cómo le voy a caer mal a la gente? Si soy un amor <3
Le había dejado mi wsp a los chicos por si tenían alguna duda del ramo o si necesitaban ayuda para entender algo. Armamos un grupo del ramo para resolver todo y armar juntas de estudio, mi intención era que les fuera de lo mejorcito.
Jano siempre se mostraba igual conmigo, era un chico muy misterioso para mi y aunque quería preguntarle sobre él, no podía o algo me lo impedía. No se, una intuición.
De pronto, noté que igual se ponía medio nervioso cuando yo andaba cerca, así que pensé en aprovechar eso para ver si podía saber más sobre él. Escuchaba que uno de sus compañeros lo molestaba porque se puso rojo cuando le pregunté algo referente al ramo jaja, pero lo defendí preguntándole al otro si acaso estaba celoso de que él. Porque lo dejé bien plantado al chiquillo diciéndole que él (Jano) era súper inteligente y además bastante guapo. Ahí quedó calladito el otro jajjaa.
En fin, de vez en cuando nos encontrábamos en el gimnasio entrenando u otras veces lo pillaba mirándome en básquet. De ahí fue que creo que empezó algo muy interesante, porque una tarde me escribió al wsp para saludar y preguntarme cómo estaba. Algo totalmente nada que ver, pero le respondí muy buena onda y empezamos a charlar de a poco, porque yo igual estaba ya bastante ocupada con la tesis. Entonces, dar la ayudantía, el taller y entrenar era el resto de tiempo libre que tenía.
Empezamos a conversar más que antes, durante las tardes era él quien tomaba la iniciativa y me escribía, cuando nos topábamos por la U nos saludábamos y todo súper buena onda. Hasta que un día, habrá sido por ahí por la segunda semana de Abril en que me preguntó si me gustaría salir con él. Al principio dudé en responderle, porque como era su ayudante no correspondía, ¿pero qué habría de pasar? jjaja
Salimos por una tarde, él fue muy bien vestido y perfumado. Yo fui apenas con lo que pillé porque venía saliendo de la U recién jaja, pero a Jano no pareció molestarle ni nada.
Me llevó al mall y pasamos a comprarnos una hamburguesa, unas papitas y una bebida. Él se comportó como un verdadero caballero en esa salida, conversamos mucho más que antes aquella tarde hasta que me fue a dejar al depa (eso suma puntos, muchachos).
Otro día volvimos a salir a caminar, después nos juntamos a tomar helado y finalmente me invitó a su pensión a ver una película jajaja la típica "te invito a ver Netflix". Pasé a comprar cabritas y bebida y nos quedamos ahí echados en su cama. La escena claramente estaba hecha para ya saben qué. Me acomodé en la almohada y él me dijo: Si quieres, te puedes acomodar acá" (señalando su hombro), eso hice y noté que Jano se había puesto un poco nervioso.
Le pregunté si le pasaba algo y me respondió con un gallito jajaja, nos reímos y me quedé mirándolo un rato. Él hizo lo mismo y simplemente me atreví. Me acerqué un poquito y le di un beso bien lentito. Él me correspondió y nos estuvimos besando un ratito ahí, abrazados. Sentía sus manos en la cadera y yo acariciaba su carita. Los segundos se hicieron realmente eternos en ese instante porque Jano se notaba mucho más nervioso jjaaja y yo trataba de calmarlo un poquito.
De pronto sentí una de sus manos en mi pierna y di un leve saltito, pero no había problema con él porque igual me gustaba, así que seguí besándolo con más ganas.
Empezamos a ponernos medio loquitos y él me tomó para ponerse sobre mi en su cama. Abrí mis piernas para que se acomodara y comenzamos a frotarnos lentito al principio, creo que estábamos muy excitados en ese momento porque ambos jadeamos rápido mientras él me besaba el cuello. En un momento, lo vi quitándose la polera y descubrí que estaba medio marcado ajjaa, empecé a tocar y él me volvía a besar. Tenía sus caluguitas ahí bien puestas jajja tampoco era algo tan trabajado, pero bien mantenido el niñito.
Yo quería empezar luego con el asunto, pero igual nos daba cosita ser pillados jjaaja. Yo me quité la polera también, quedando en puro sostén frente a él y lo único que Jano quería era sacármelos para besarme los pechos.
Sólo podía besarlos desde arribita y yo tampoco lo dejaba porque quería besarle la boca también. Fue un momento realmente caliente, lo admito. Estaba vuelta loca y con más ganas que nunca, pero todo se fue a la B cuando mi celular empezó a sonar.
Era Cata, que estaba fuera de mi depa esperando a que yo le abriera jajaja. Me puse más nerviosa y apenas le podía contestar porque estaba con la respiración a tope.
Le pedí disculpas a Jano y simplemente me escapé de ahí. Llegué hasta la entrada del edificio y para más vergüenza, Cata me pilló toda despeinada jajajaja Le expliqué lo que había pasado y ella se rio aun más porque de haber sabido, no me hubiera llamado. Me dijo explícitamente: "Si vas a tirar, tienes que avisarme" jajajjaa.
Cómo voy a estar avisándole cada vez que voy a tirar con un mino jjajaa.

Esta es sólo la primera parte, gentecita bella. Espero que gusten de mis vivencias, mi época universitaria se está acabando, más no las experiencias. Les dejaré una fotito de regalo para todos aquellos que han seguido mi vida y me han dejado sus mensajitos llenos de buena onda y que además han sido re caballeros conmigo.

 

Graaacias a ti siempre te veo en mis publicaciones comentando con buena onda saluditos

 

La segunda parte ya está de hace rato jajaja