Estudio: Los progresistas muestran tres veces más sesgo que los conservadores

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Un estudio reciente exploró cómo los liberales* y conservadores en los Estados Unidos evalúan los atributos profesionales, el carácter personal y la idoneidad laboral de una persona basándose en las publicaciones de Facebook de esa persona. Los resultados indicaron que ambos grupos tendían a evaluar más negativamente a individuos ideológicamente opuestos. Sin embargo, este sesgo fue tres veces más fuerte entre los liberales en comparación con los conservadores. La investigación fue publicada en el Journal of Social Psychology.

En los Estados Unidos, los conservadores políticos y los liberales representan dos perspectivas ideológicas principales con opiniones divergentes sobre el gobierno, la economía, los problemas sociales y más. Los conservadores, típicamente asociados con el Partido Republicano, generalmente favorecen una intervención limitada del gobierno en la economía. Abogan por impuestos más bajos, reducción del gasto gubernamental y regulación mínima de las empresas. Los conservadores también tienden a priorizar valores tradicionales, a menudo apoyando políticas que defienden interpretaciones conservadoras de la familia, la religión y la identidad nacional. Enfatizan la responsabilidad personal y la autosuficiencia.

Los liberales, a menudo vinculados con el Partido Demócrata, generalmente apoyan un papel más activo del gobierno en la sociedad y la economía. Abogan por políticas que aborden la desigualdad económica, como impuestos más altos para los ricos, programas de bienestar social aumentados y una mayor regulación empresarial. Los liberales también impulsan políticas sociales que promueven los derechos civiles, la protección del medio ambiente y la igualdad en áreas como el género y la raza.

Algunos autores sugieren que los conservadores podrían tener rasgos disposicionales que los hagan más propensos al prejuicio y una mayor inclinación hacia el autoritarismo que los liberales. Esta visión se conoce como asimetría ideológica. Sin embargo, otros estudios han demostrado que los liberales son tan propensos como los conservadores a participar en actividades como la negación de la ciencia cuando los hallazgos científicos entran en conflicto con sus actitudes políticas, y tienen igual probabilidad de deshumanizar a sus oponentes.

El autor del estudio, Robert D. Ridge, y sus colegas querían poner a prueba las suposiciones de la asimetría política y también ver si hay diferencias entre los dos grupos en su propensión a la agresión motivada ideológicamente. Los autores razonaron que los grupos políticos estadounidenses es poco probable que se involucren en agresiones físicas entre sí. Sin embargo, las diferencias políticas podrían llevarlos a participar en agresiones indirectas, como acciones que sabotean las relaciones sociales de sus oponentes ideológicos y socavan su inclusión en grupos.

«Ha quedado claro que la brecha ideológica en los Estados Unidos está creciendo y que las personas se están polarizando más en sus creencias», explicó Ridge, profesor asociado de psicología en la Universidad Brigham Young. «La asimetría ideológica es la noción de que los conservadores son más prejuiciosos que los liberales, pero la hipótesis de conflicto de visiones sugiere que los conservadores y liberales pueden ser igualmente prejuiciosos hacia aquellos con visiones del mundo y valores diferentes».

«Quería enfrentar estas dos teorías entre sí para ver quién sería más propenso a agredir indirectamente a una persona que tenía una ideología diferente a la suya. Quería ver si simplemente publicar apoyo en las redes sociales por una posición conservadora o liberal sería suficiente para provocar agresión indirecta de una persona con una ideología diferente en un ámbito completamente ajeno a la política».

Los investigadores llevaron a cabo un estudio en el que exploraron cómo los memes políticos publicados en las redes sociales afectan la impresión de la persona que los compartió. También querían determinar en qué medida la persona que veía los memes agrediría indirectamente a la persona que los publicó basándose en una suposición sobre las opiniones políticas de esa persona. Estos autores plantearon la hipótesis de que las personas evaluarían más negativamente a una persona si la perciben como un oponente ideológico.

Los participantes fueron 679 trabajadores estadounidenses de Amazon MTurk con una edad promedio de 39 años, y el 78% eran caucásicos. De estos, 383 se identificaron como conservadores, mientras que 299 se consideraban liberales.

Los investigadores crearon cuatro páginas de Facebook, dos presentando a una persona con una actitud ideológica conservadora y dos con una actitud ideológica liberal. En cada par, una página presentaba memes y la otra contenía texto. Las páginas conservadoras incluían contenido pro-Donald Trump y anti-socialismo, mientras que las páginas liberales presentaban contenido anti-Trump y pro-socialismo.

Los memes y textos conservadores y liberales fueron diseñados para ser lo más similares posible, reflejando opiniones políticas opuestas (por ejemplo, «Solo voy a decirlo: ¡ODIO a Trump!» (emoji de cara enojada) vs «Solo voy a decirlo: ¡AMO a Trump!» (emoji de cara feliz)).

Los participantes leyeron una historia de portada que presentaba a los autores del estudio como psicólogos industriales/organizacionales que desarrollaban un algoritmo de aprendizaje automático para ayudar a los empleadores a contratar nuevos empleados para un puesto de cuello blanco de nivel básico. Se les pidió a los participantes que ayudaran a recopilar materiales para entrenar el algoritmo para revisar automáticamente las redes sociales de posibles empleados para determinar su idoneidad laboral.

El sistema luego seleccionó aleatoriamente una de las cuatro páginas de Facebook para mostrar al participante del estudio, presentándola como supuestamente perteneciente a uno de los solicitantes, y le pidió al participante que la revisara y evaluara las habilidades, el carácter y la idoneidad del solicitante para un trabajo.

Los resultados mostraron que los participantes pasaron un promedio de 65 segundos mirando la página asignada antes de responder. Menos del 10% de los participantes dieron sus evaluaciones después de pasar menos de 10 segundos en la página.

Como se esperaba, tanto los liberales como los conservadores evaluaron más favorablemente a los objetivos cuya ideología coincide con la suya y menos favorablemente a aquellos con ideologías opuestas. Este fue el caso para todas las características que estaban evaluando: atributos profesionales (deseables e indeseables), carácter personal e idoneidad para un trabajo.

«Las personas son rápidas para formarse impresiones a partir de publicaciones en redes sociales, y esas impresiones pueden tener consecuencias importantes para el que publica», dijo Ridge. «Muchas personas publican información en las redes sociales y nunca imaginan que un posible empleador podría estar mirando la información y usándola para decidir si contratar o no a la persona. Ya sea un meme divertido o una cita ingeniosa, el mensaje podría resultar en consecuencias no deseadas. Si la publicación es política, podría afectar la reputación del que publica en otros ámbitos, ya sea políticamente conservadora o liberal».

Sin embargo, contrariamente a las expectativas de la hipótesis de asimetría ideológica, esta diferencia en las evaluaciones fue mucho más pronunciada en los participantes liberales, en comparación con los conservadores. La diferencia entre las evaluaciones dadas a los solicitantes liberales y conservadores basadas en sus supuestas páginas de Facebook fue tres veces más alta en promedio cuando los liberales estaban haciendo las evaluaciones en comparación con las evaluaciones realizadas por conservadores.

«Me sorprendió mucho que el nivel de sesgo liberal contra los conservadores fuera casi tres veces mayor que el sesgo conservador hacia los liberales», dijo Ridge. «Esto es directamente lo contrario de lo que predice la asimetría ideológica. También me sorprendió que, dado este resultado, los participantes liberales afirmaran que los conservadores eran mucho más prejuiciosos que los liberales, mientras que los conservadores no atribuyeron más prejuicio a los liberales que a los conservadores. Esto va en contra de la opinión popular sobre liberales y conservadores en los medios de comunicación populares y en la literatura empírica».

El estudio arroja luz sobre cómo la ideología política afecta las evaluaciones de otras personas. Sin embargo, también tiene limitaciones que deben tenerse en cuenta. Especialmente, los participantes del estudio evaluaron páginas que solo contenían memes y lemas políticos. Los hallazgos podrían haber sido más complejos si hubieran estado disponibles datos más relevantes para la idoneidad laboral o información más personalizada.

«Estudiamos una forma de agresión donde los perceptores podrían ‘torpedear’ la reputación profesional de una persona de una manera muy indirecta», señaló Ridge. «Es un solo estudio, pero los resultados no son inconsistentes con la investigación emergente sobre agresión política».

«El próximo paso es probar este hallazgo de una manera más directa», dijo el investigador. «Acabamos de completar un estudio en el que los sujetos creían que sus evaluaciones de una persona objetivo realmente podrían afectar sus posibilidades de obtener una oportunidad profesional de alto nivel. Evaluaron currículums y declaraciones personales que incluían señales relativamente sutiles sobre sus orientaciones políticas. Al igual que en nuestro estudio publicado, obtuvimos el mismo patrón de resultados que son consistentes con la hipótesis de conflicto de visiones».

The paper, “To meme or not to meme? Political social media posts and ideologically motivated aggression in job recommendations,” was authored by Robert D. Ridge, Christopher E. Hawk, Luke D. Hartvigsen, and Logan D. McCombs.

Fuente: Liberals three times more biased than conservatives when evaluating ideologically opposite individuals, study finds

(*) ¿Qué es un liberal?

«Liberal» es un término con múltiples significados, que varían según el contexto político y cultural.

En un sentido político más amplio, el liberalismo se divide en dos ramas principales: el liberalismo clásico y el liberalismo social.

• El liberalismo clásico se centra en la libertad individual, la propiedad privada, el libre mercado y la limitación del poder del gobierno. Los defensores del liberalismo clásico suelen abogar por políticas que promuevan la competencia, la empresa privada y la mínima intervención del Estado en la economía.
• Por otro lado, el liberalismo social se enfoca en la libertad individual en áreas como los derechos civiles, la igualdad de género, la diversidad y la tolerancia. Los liberales sociales tienden a apoyar políticas que promuevan la igualdad de oportunidades, la justicia social y la protección de los derechos de las minorías.

En algunos países, como en Estados Unidos, el término «liberal» a menudo se asocia más estrechamente con el liberalismo social y políticas progresistas, mientras que en otros lugares puede tener una connotación más cercana al liberalismo clásico o al liberalismo económico.

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