Fiestas patrias se a transformado para muchos en la bacanal del alcoholismo, una triste realidad.

Se deberían dejar dos días de celebraciones 18 y 19, con eso basta y sobra. Siete días es sólo para incentivar a que la industria del alcohol en Chile lucre. Esta efemerides es símbolo de alcoholismo, si quieren pueden ir a los centros de urgencias de los hospitales de como llega en camionadas gente intoxicada con alcohol, heridas riñas callejeras entre pelea de cuaraos, accidentes, choques por curaos. Antes está fiesta estaba llena de juegos para niños, carreras de saco, tirar la cuerda, competencia de manzanas, eran otros valores que se daban. Hoy es sólo tomar y tomar, si a esos agregamos los desagradables efectos del tabaco mezclado con el alcohol que pone la piel sudorosa del alcohólico con olor a zorrillo y el aliento a fosa septica. La gente no quiere cuidar su salud quiere solo maltratar su cuerpo con toxinas, hacer pedazos sus riñones, su hígado y estomago, el hígado sólo puede sintetizar cierta cantidad del alcohol producido por la descomposición natural del azúcar de los alimentos, pero el alcohol que existe en las botellitas es alcohol directo y este produce por cada trago un microdaño acumulativo al hígado, hasta que pasen decadas y terminen con cirrosis y cáncer hepatico.

 

Tercera jornada de bacanales de fiestas patrias ya cobran 16 víctimas, ayer eran 11. Todo auspiciado por los grandiosos piojos políticos que gobiernan Chile, obvio si detrás de todo eso hay un gran negocio del alcohol. Dbería aver un terremoto para aguar esta wea, seguramente al terminar está semana ya iran en 40 víctimas producto del consumo degenerado del alcohol.



http://nacional.biobiochile.cl/notas/2012/09/17/tercera-jornada-de-fiestas-patrias-12-personas-fallecidas-en-accidentes-de-transito.shtml

 

Mi familia tiene una casa en el sector plaza Perú de Concepción (barrio universitario), en el año 2000 era un sector tranquilo con una atmósfera intelectual donde se colocaban personas a pintar cuadros y a tocar música clásica y conteporanéa Jacqueline van Rysselberghe Herrera gracias sus politicas liberales con respecto al negocio del alcohol, cuando era alcaldeza, firmo una serie de permisos para el establecimientos de botillerías dirigida a jovenes universitario, no fue más comenzaron a arrendarse propiedades colindantes a la casa nuestra ya que los empresarios del alcohol pagaban muy bien, consecuencia de eso el barrio y la atmósfera del barrio se degrado comenzaron a desfilar los flaites, y gente lumpesca, comenzaron negocios a meter boliches de tragamonedas, comenzaron a asaltar a los estudiantes que salían de la universidad en las tardes, entraban a robar a los domicilios, desvalijaban los autos estacionados, veíamos como supuestos decentito universitarios salían hecho bolsa arriesganose ser atropellados y asaltados, mientra esta gentuza de los negocios del alcohol lucraban condicionando el vicio a supuestos futuros profesionales, los bares se encuentran a escasos metros de la universidad y a escasos metros de sectores residenciales, los días viernes se llena de flaites buscando a quien asaltar o carterear, el barrio dejó de ser decentito y tranquilo, por seguridad nos vimos obligado a colocar en venta la casa y ya no los daban el precio de antes, porque el tasador de la corredora de propiedades dijo que debía bajarlo porque ya no valía lo de antes por el entorno que está socialmente deteriorado por las llegadas de botillerias. La casa la ibamos a vender en $230.000.000.- es una casa antigua de material, espaciosa con patio grande, al fin la colocamos en venta por $160.000.000.-. Y todo por culpa de esa ex- alcaldeza de mierda que según confirme por buenas fuentes es toda una alcoholica, unos amigos la vieron en un casamiento de un familiar estaba vuelta raja y hablando puras weas, hasta que vino el maridito y se la llevo cagando en el auto. Así son nuestras autoridades aplican lo que ellos son en las sombras, y más encima esta vieja de mierda se hacía llamar medico psiquiatra de psiquiatra no tiene nada.

Esta es de una de las tantas políticas y alcaldezas chilenas que a atizado el alcoholismo juvenil, en Concepción dejó regada la ciudad de botillerias gracias a las miles de patente de alcoholes que firmaba cada patente tiene en costo de venta de $5.000.000.-