La madura tetona de Peñalolen

Tema en 'Relatos Eróticos' iniciado por Palomoo, 22 May 2022.

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  1. Palomoo

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    Continuando con mis andanzas en paginas de rrss y es momento de contar otra historia.
    Antes de seguir, puedo decir que tengo 38 años, soy soltero (aunque con pareja), pero siempre he sido muy caliente y mi lema a sido que a cualquier mujer que se me pone en frente es potencial candidata a meterselo. Siempre mis preferidas han sido las mujeres mayores, ya que encuentro que gozan más del sexo, son desinhibidas y saben lo que quieren.
    Hace unos meses en Tinder hice mach con una mujer mayor (55años según ella) que estaba casada, rubia, de ojos verdes, con bastantes kilos de más, (fácilmente unos 120 kilos), pero junto con esto unas tetas enormes y un culo gigantesco. Me decia que trabajaba en una oficina y su marido chofer, por lo cual el a veces se iba algunos dias de Santiago.
    Al inicio me dice que estaba en Tinder solo para ampliar su circulo de amistades, pero a medida que hablábamos y ganaba su confianza me dice que en realidad buscaba conocer a alguien para algo más. Y con un poco más de confianza me dice que su esposo poco y nada le hacia en la cama y que ella tenia también sus necesidades sexuales.
    Tras eso último, me llegó mi angel malo y busqué la forma de seducirla, aunque en un inicio no me tomaba en cuenta al encontrarme muy menor (inclusive menor que uno de sus hijos) Hasta que un día, le envio un video semi desnudo (solo en bóxer) diciéndole que me tenia muy caliente. Tras ese video, deja de hablarme por un rato (tampoco le insisti) Pasaron como 3horas (ya pensaba que no me iba a hablar más) y me habla diciendo que no creía que estaba asi por ella y le dije que para que me creyera hicieramos una videollamada. Para mi sorpresa me dice que ok, pero que silenciará la videollamada.
    Me llama y aparece ante mi una mujer bastante madura, llevaba solo una polera de tirantes de satin (eran cerca de las 24hrs) y bueno empecé a desnudarme y hasta quedar en bóxer le digo que si quería verme sin nada, ella se tendría que bajar la polera y mostrarme sus tetas. En un inicio no queria, pero empecé a jugar con mi pene y eso hizo que tímidamente se bajara un tirante y luego otro y me enseñó sus tetas. Aunque solo mostraba sus tetas, se notaba que se masturbaba en la videollamada, mientras yo también hacia lo mismo y puse el celular desde abajo (para que mi pene se viera mucho más grande de lo que es), hasta que de pronto acabo y ella se saborea al ver mi semen fluir por mi pene.
    Después de esa videollamada, nuestras conversaciones subieron de tono, ya intercambiábamos fotos y videos, pero esto (para mi) no iba a quedarse solo en pajas, si no que planee la forma de juntarme con ella y meterselo.
    Y bueno, como sabia que ella vive en Peñalolen (y yo en La Florida) le propuse que nos viéramos en alguna estación de metro después de la pega. Ella decia que no podia, que tenia cosas que hacer en la casa, que a veces estaba su marido… pero le insistí, hasta que un dia me dice… veámonos hoy a las 7:30 de la tarde cerca del metro Los Orientales y que ella me iba a pasar a buscar en su auto.
    Llegue al punto de encuentro a las 19:20 y a los minutos aparece un sedan, me hace un cambio de luces y era ella. Me subo al auto y nos saludamos con un beso en la comisura de los labios. Le digo que vayamos a comer algo al Mall Plaza Egaña y me dice que no, ya que trabajaba un hijo allí y solo dimos unas vueltas por las cercanias y le digo que vayamos a la entrada del Parque Quebrada de Macul y alli estaremos tranquilos. Llegamos a ese punto cerca de las 20:30 y empezamos a conversar tranquilamente y mientras la ciudad se iba oscureciendo, me estaba dando más calor. En esos momentos su mirada me lo decía todo, era obvio que yo no le era indiferente, estaba muy osada (mostraba bastante su escote), muy sugerente, la verdad yo estaba bastante caliente, pero habia que dar el proximo paso que era llevarmela a un motel, pero ella solo coqueteaba, así que me acerqué a su rostro y empezamos a besarnos. Un beso acompañado de mucho manoseo, en donde mis manos se fueron a su cintura y empece a subirle la polera, se la subi a la altura de su cuello hasta ver sus grandes tetas encerradas en un sostén con encajes blancos.
    Al verla asi, pongo mi cabeza entre sus tetas y empiezo a lamerlas y de a poco le baje la copa de la teta derecha y vi su pezon rosadito y paradito, el cual empece a morderlo suavemente. Y sus gemidos empezaron a ser audibles. Estuve varios minutos alli perdido en sus tetas, hasta que me separé un poco de ella, levante un poco mis caderas y me baje el jeans y boxer a medio muslo y ella me dice.
    -Guauuu… que grande y duro
    -Es normal-le dije
    -Es mucho más grande y grueso que el de mi marido.
    Tras decir eso, corre el asiento para atras, se acerca a mi entrepierna y se lo mete a la boca y me lo chupa por algunos segundos, hasta que de pronto suena su teléfono y era su hijo diciendo que había llegado a la casa, pero no andaba con las llaves y mi madura amante le dice que andaba por el centro y que llegaria en media hora.
    Al oir esto, supe que no iriamos a ninguna parte y me dice.
    -Me tienes muy mojada Gabriel
    Me toma la mano y me la coloca sobre su concha y estaba muy caliente y continua diciendo.
    -Quiero tener este pico dentro de mi.
    -Pero ahora ya no, ya que debes ver lo de tu hijo.
    -Asi es, pero quiero tomar tu leche.
    Asi que continua pajeandome y de pronto me dice
    -Ven para aca, bajate y colocate en la puerta del conductor.
    Hago caso y al tenerme alli me baja un poco el pantalon y saca mi pene por sobre el boxer y empieza nuevamente a chuparlo, pero la sensación de que nos pillaran era alta, lo que hizo que me corriera rapidamente en su boca y tras eso me acomodo la ropa y vuelvo a entrar al auto. Alli al entrar ella aun tenia mi semen en su boca… se mete un dedo (como haciendo que era mi pene) y lo chupa y al tiempo que lo chupa, se traga toda mi leche. Estuvimos unos minutos recuperando el aire, nos reimos un poco y empezamos nuestra bajada de aquel mirador y le digo.
    -Lo chupas muy bien
    -Gracias… imagino que lo debes hacer súper rico
    -Eso lo debes comprobar personalmente.
    -Cuando?
    -Pensaba en hoy, pero tu hijo nos jodió la salida.
    -Igual hoy no hubiera podido hasta tan tarde, recuerda que mañana trabajo y tengo varias cosas que hacer.
    -Te entiendo
    -El fin de semana (sábado o domingo) estaré disponible desde temprano… podriamos juntarnos e ir a una parte para continuar conociéndonos.
    -Genial.
    Bajamos por Grecia, luego se desvió por Tobalaba y continuó por Quilin y a dos cuadras del metro, me dice..
    -Disculpa por no acercarte a tu casa
    -Descuida… no hay problemas
    Antes que dijera algo, nos volvimos a besar y volvi a levantarle la polera y le bese sus tetas un rato.
    Ya los dados estaban tirados, habia que esperar un par de dias, mientras tanto, ya nuestras conversaciones giraban en torno al sexo, a lo que nos haremos. Fotos y videos nos acompañaron en esas conversaciones, hasta que el viernes en la noche me dice.
    -Veamosnos mañana tipo 10 en el mismo lugar de otro dia. Lo que si, puedes ir en tu auto?
    -Si, nos vemos mañana. Te deseo
    -Yo también… quiero sentirlo duro
    Y llegó el dia, a las 9:50 estaba en el lugar y al par de minutos llega ella. Iba con jeans ajustados y una blusa verde claro. A lo mejos se veia muy pechugona y se notaba que llevaba un sosten push up. Al contemplarla unos segundos, la llamé y le di indicaciones ee donde estaba yo. Al verme, hice que se subiera a mi auto y al saludarnos con su buen calugazo empezamos una grata y sensual conversación, admirando el voluminoso cuerpo de mi acompañante, sentada a mi lado, tratando de desviar la mirada a esas enormes tetas que constantemente se me insinuaba. Se mostraba muy interesada en mi conversación, sentada de lado mirándome fijamente.
    Después de manejar unos minutos, llegué al sector de Pedro de Valdivia con Quilin y al ver que no habia nadie atras, ni al frente, la empiezo a besar y le meto mi mano debajo de su blusa y toque sus tetas, sintiendo un encaje que llevaba de sostén y me dice:
    -Vamos amor al motel, no pierdas tiempo manoseandome en la calle.
    En eso, cambia el semáforo (no crucé cuando debia hacerlo) y llegan autos detras de mi y para mi sorpresa esta amante empieza a desabotonarse la blusa y al tenerla abierta me muestra sus tetas grandes apretadas en un sostén de encajes push up, antes de siquiera tocarla, cambia el semáforo y me tocan la bocina para que avanzara y muy rápido salgo del mencionado cruce y me detengo al par de cuadras y la empiezo a besar, le meto mis manos a sus tetas y ella toca mi pico por sobre el pantalon y le digo.
    -Me tienes muy caliente.
    -Y tu a mi.
    Tras decir eso, volvi a mover el auto y a los minutos estabamos entrando en un motel (uno del sector de San Joaquin), asi que entre el auto, corri la cortina y al cerrarla ella baja del auto y comenzó a caminar delante mío, dándome una perfecta visión de sus abundantes nalgas, moviéndose a cada paso, estando seguro, que en poco rato más, las podría tener al fin en mis manos.
    Entramos a la cabaña, prendió la luz, dejó su cartera en la mesa y antes de comenzar con la accion, suena el teléfono de la cabaña y ella lo contesta y me preguntó que me gustaría tomar y le dije que solo una bebida, a lo cual ella tambien pide otra y a los minutos llegan las bebidas y para mi sorpresa, ella me dice que pagará, asi que cancela el motel, recibe las cosas y le digo
    -Mmm que ricas tetas tienes …
    -Son enormes ¿verdad? .. ¿ parece que te gustan?
    -Me encantan …
    -Mmmm.. ahora son todas tuyas mi rey.
    Se notaba la experiencia de esa vieja mujer, se quedó de pié dándome la espalda, que quita la blusa, me acerco por atras y empiezo a besar su cuello y dejándome tocarle las tetas a mi antojo, mientras al mismo tiempo restregaba su enorme culo contra mi cuerpo.
    Que tremendas tetas tenía en mi mano, como me deleitaría con esas semejantes ubres en mi boca, no dejaba de tocárselas, mientras le hacía sentir contra su culo como me había puesto. Se dio vuelta y me besó, correspondiendo su beso.
    La tomé de la cintura, era enorme, apenas podía abarcarla, pero no tuve problemas para poder agarrarla del culo. Mis predicciones se habían concretado, ya tenía ese enorme pedazo de culo entre mis manos y esa mañana todo su cuerpo sería mío.
    Luego de dejarse tocar por todos lados, muy tranquila, me tomó de la mano y me llevó a la cama, en donde me dice que me tienda en la cama y muy confiada de sí misma, sin importarle su cuerpo, se fue desnudando poco a poco (en rigor solo debía quitarse el jeans) hasta quedar solo en ropa interior y para mi sorpresa, llebaba una tanga muy pequeña que se perdia en su culo y con un movimiento muy rapido, se quita el sostén y entran a escena dos tetas muy grandes y luego se quita su tanga y para mi sorpresa tenia su concha totalmente depilada.
    Y estando desnuda, se tiende sobre mi, empieza a besarme y me quita con rapidez la camisa, luego empieza a jugar con mi jeans y me lo desabotona y me lo quita y al tenerme solo en bóxer, acerca su cabeza alli, pasa su lengua a lo largo del bulto que tenia y pasa sus tetas por el entorno, hasta que me lo baja y alli salta como un resorte mi pene apuntando hacia el techo, esperando que mi presa, me la chupara y tal como deseaba, ella empieza a chupar mi pene de una.
    Mientras lo engullia con ganas, yo tocaba sus tetas que eran blancas, muy blancas, con un enorme pezón rozado. Y en eso me quedó mirando, riéndose seguramente de la cara que tengo que haber puesto al ver semejantes carne.
    Sin ninguna vergüenza, se las tocó, preguntándome si me gustaban y si era lo que yo buscaba. Le dije que me fascinaban y que ya las quería. De eso, dejó de hacerme oral y se acostó a mi lado y lo primero que hice, fue tragarme una de estas enormes tetas blancas, gordas y exquisitas. Se las chupé con fuerza, eran casi del porte de mi cabeza. Me deleite chupándoselas por largo rato, como si el tiempo se hubiese detenido, nada más me importaba que chupar esas tetas que caian por gravedad hacia los lados, mientras ella se masturbaba tranquilamente viendo como me devoraba sus pechos. Después de un rato me detuve queriendo probar algo más, me incorpore sobre ella le separe las gruesas piernas, metiéndome entre ellas y admiré su rosada, mojada , grande y depilada concha.
    -¿Te gusta? (separándose ella misma sus labios vaginales dándome una completa visión )

    - Mmm me encanta… mas cuando me la muestras así

    -Me encanta que me mires…. Me calienta… me excita mostrártela… Mira como esta mojada , tú me la tienes asi. Hace como 2 meses no recibe cariño

    -Mmm se ve rica .. me pregunto si sabrá tan rica como se ve …

    - Mmm no se… haber, déjame ver… (y se mete unos dedos, luego los saca y se los lleva a su boca saboreándolos) … mm si , esta rica . sabrosa.

    - Ufff que caliente que eres, me encanta. Lo pasaremos muy bien parece… déjame probarla ahora a mi …

    -Toda suya mi rey, esta mañana todo lo que quieras mi rey.

    Me agacho y empiezo a chuparla

    -Mmmmmmmm ah que lengua mas rica!!! …. Ahhhhhhh . eso!!!! ……. ¡Asi! . ¡chúpamela corazón!.. chúpame la conchita mmmmm

    De solo escucharla gemir y hablar, me daban ganas de acabar, ¡que vieja mas caliente me había encontrado! Realmente era una puta caliente y con ese sugerente “todo lo que quieras mi rey” que le salia de un tono flaite muy calenton que había quedado grabado en mi mente, sabiendo perfectamente lo que iba a querer.

    Me deleité por un buen rato chupándole la zorra, interactuando con ella, pidiéndole que se la abriera, que se metiera los dedos, que probara sus jugos, metiéndole yo mismo a hasta 4 dedos que cabían sin ningún problema.

    -Mmmm que delicia, mmmm, que rico me la estas chupando corazón … luego me va a tocar a mi ¿ok?

    -Mmmm .. No sabes las ganas que tenia de estar contigo

    -¿Si?, no te creo, si eres tan joven y rico y ¿para que querías estar con una vieja como yo?, ¿tan vieja y gorda?

    -Mmm pero es que con esas tetas que tienes. A que hombre no le gustaría estar acá

    - ¿Pero tan gorda , no te molesta?

    -Mmmm al contrario, me excita ver tanta carne y para mi solo

    - Ja ja … mmm que rico que te guste mi cuerpo mi rey. A mi me gustan mis tetas, son mi orgullo y me encanta que me las chupen

    -Mmm despreocúpate que te las voy a chupar por mucho rato mas ..

    -Todo lo que quieras, te voy hacer muy sincera. Yo cojo muy poco con mi marido, el casi nunca tiene ganas y cuando comencé a hablar contigo me calentaste de una y no puedo creer que estes aqui conmigo. Por lo que prepárate que te voy a dejar seco

    - Que bien .. es quiero ..

    -No soy una mujer fácil de complacer, pero tu vas muy bien mi rey.

    Mientras conversábamos, no dejaba de comerle la concha y de meterle mis dedos y dejaba que ella tambien lo hiciera, dándome un espectáculo de su concha abierta. Después de disfrutar de su concha, me salí de ahí, listo para follarmela, cuando me detiene, diciéndome que me esperara un poco. Se levanta y me dice que me acomodé en la cama y observo como la veterana gateaba hasta mi entre pierna. Me tomó el pene desde la base y comenzó a jugar con el. Lo tomo con una mano, clavándome suavemente sus uñas y empezo a masturbarme, mientras lo hacia, a veces golpeaba mi pene contra su cara, lo pasaba por su nariz, por sus ojos, le daba muy suaves besos en la punta, bajando con su lengua a todo el largo de mi pico, recorria centímetro a centímetro con su lengua, para luego comenzar a masturbarme muy suavemente.

    Se tomaba todo el tiempo del mundo en atenderme, mientras yo la veia sentado y disfrutaba del trabajo que me estaba entregando esta mujer. Luego me colocó sus enormes tetas sobre mi pene, y se la comenzó a restregar. Hasta chica se veía mi herramienta con semejantes tetas sobre ella. Subía y bajaba aprisionándomelo, haciéndome sentir delicioso, luego las dejaba colgando y se movía de lado a lado haciéndolas chocar contra mi palo, realmente lo hacía muy bien.

    Luego bajo mas, masturbándome un poco mas fuerte para terminar metiéndose por completo a la boca, llegando hasta la base con toda mi pene metido en su boca y garganta. Comenzó a darme una chupada increible, suave a veces fuertes otras veces suaves, apretándome las bolas, restregándosela por la cara, mientras yo veia a la veterana aplicar todas sus dotes orales.

    -Ahhhh eres increíble, que manera de hacerme sentir placer

    - Mmm ¿ te gusta?

    -Ohhh si me encanta!!! Jamás me la habían chupado con tantas ganas

    -Te lo puedo chupar todo el dia (me decía con mi pene aun en la boca), si hay algo que me calienta es tener un pedazo de carne tan duro como el tuyo en la boca, realmente me fascina asi que relajese mi rey y deje que yo haga todo el trabajo.

    -Mmmm me encanta ver como te la metes toda

    -Mmm asi, que me la meta entera a la boca

    -Ohhh siiiiiii, hazlo… mmmmmmmm

    -Ohhgggggg

    -Ohhhhh Dios mio te la metes entera, que placer, no pares

    Completamente relajado viendo como la veterana en cuatro patas, con sus enormes tetas colgando, disfrutaba con calma y con todo el tiempo del mundo de chuparmelo, sin apurarse, a veces echándome sus tetas encima y moviéndose hacia los costados para que estas chocaran contra mi pene. Uuffff que manera de disfrutar.

    A pesar de su su edad, algo tenía esa mujer que me calentaba, que manera de ser caliente y yo estaba dejándome llevar.

    Luego bajó hasta mis bolas, yo me abrí de piernas lo más que pude para darle espacio. Sentía su lengua mojándome las bolas, metiéndosela en su boca, succionándolas de la manera justa ni muy suave para no sentir ni muy fuerte para que no me doliera. A veces bajaba con su lengua un poco mas, sintiendo su lengua buscar la entrada de mi ano.

    Yo podría haber estado todo el día recibiendo las caricias de su boca sobre mi sexo, pero me sentía algo egoísta, hasta que luego de mucho rato de trabajar entre mis piernas, se salió de ahí y se me comenzó a montar encima. Vi como esas tetas se me venían encima, sentí el peso de su cuerpo acomodarse sobre mí, hasta que colocando una pierna a cada lado de mi cuerpo, y tomándome ella misma mi pene y fue bajando lentamente, enterrándose de apoco mi herramienta, hasta que dejó caer todo su peso sobre mi enterrándosela hasta el fondo.

    Ni siquiera me podía mover. Ahí me encontraba yo con esa mujer de 60 años (me habia dicho que habia mentido en la edad en la app para que le hablaran) y sus 120 kilos montada sobre mi pene, moviéndose lentamente, con sus ojos cerrados y rostro arrugado, disfrutando de estarse comiendo mi verga. Subió y bajo lentamente varias veces, mientras yo solo atinaba a amasarle sus tetas que descansaban sobre su abultado vientre. Ya cuando se acostumbro, fue relajándose un poco mas y comenzó a moverse rítmicamente, echándose hacia adelante, dejándome las tetas a la altura de la cara, mientras yo con ambas manos se las separaba y metía mi cabeza entre ellas dejándome follar por la veterana.

    Aparte de gemir, no paraba de hablar, diciéndome lo mucho que lo estaba disfrutando, como la sentía completamente de ella, que su marido con suerte se la metia, etc.. Mientras al tiempo que sus enormes tetas chocaban fuertemente contra mi cara. Me sentia en el paraíso de las tetas.

    Luego de un buen rato, cambiamos de posición y le dije que se colocara en cuatro patas y poder follarmela por detrás. Obediente a mis órdenes, su cuerpo fue acomodándose en la posición indicada, dejándome ahí, ante mis ojos, su enorme culo a mi completa disposición. No me aguanté las ganas al verla así, y arrodillado sobre la cama, metí mi cabeza alli y empece a besarselo y chuparlo completamente, mientras mi veterana amante gemía de placer.

    Ella misma se llevó las manos hacia atrás y separo sus enormes nalgas, para poder llegar con mi boca a la entrada de su ano, degustando esa parte de su cuerpo, metiéndole la lengua lo más adentro que pude. En esta posición a veces se le soltaban los cachetes de sus manos y estas carnes me apretaba la cara.

    A los minutos me salí de ahí, la tome de sus caderas y mi mano empezo a buscar la entrada de su sexo y cuando lo encontré sin compasión, le metí todo mi pene sacándole un grito de placer y segui como un animal aferrado a ese enorme culo, le daba con todo a la vieja, con todas mis ganas y mis fuerzas trataba de llegar lo más adentro posible, chocando mi pelvis contra su cuerpo, pero que era perfectamente amortiguadas entre tanta carne.

    Me encantaba ver en el espejo de la pared como sus tetas se movían y chocaban entre ellas al compas de mis embestidas, algo realmente delicioso. Y luego de follarla un buen rato así, sacándole infinidad de gemidos, palabras obscenas y un par de orgasmos, le dije que quería metérsela por el culo.

    Ella me dice que no era un lugar muy frecuentado, ya que tenia años sin hacerlo por alli, pero que con lo caliente que estaba no tenía ni un reparo en hacerlo. No se hablo mas, le separé lo mas que pude sus enormes cachetes, hasta que vislumbre la entrada de su ano. Ella misma nuevamente ayudo a mi cometido, separándose las nalgas y solo pidiéndome que se la metiera muy despacio. Con mi mano agarrándome el pene, se la restregué en ese oscuro lugar de su cuerpo, hasta que ejercí un poco de presión, hasta que el ano de mi amante se abrió un poco y parte de la cabeza de mi pene logró entrar, pero me detuvo unos segundos pidiéndome un respiro para luego volver ambos a seguir intentando meterlo.

    Me pidió que le echara algo de lubricante que tenía en la cartera, me eché un generoso chorro y me embetuné mi pene y volví al ataque consiguiendo un excelente resultado, ya que mi pene se abrió camino poco a poco, entre gemidos de placer y algo de dolor, hasta que un buen pedazo, ya quedo dentro de ella.

    Nuevamente me pidió unos instantes para que su ano se acostumbrara y me quedé quieto y tieso, veía como la gorda echaba de apoco el culo hacia atrás, tragándose a de apoco mi mástil. Así pasó un rato hasta que su ano se fue dilatando, cada vez entraba mas y mas adentro hasta llegar a metérsela por completa, gozando con estar enculandome a esta vieja, ambos comenzamos a gozar como locos.

    Creo que llevaba más de 15 minutos alli y ese ano era completamente mío, mi pene entraba y salía a gusto, sacándosela completamente y volviéndosela a meter con furia hasta lo mas profundo de su ser, sacándole gritos de placer y halagos al tamaño de mi pico diciéndome lo mucho que lo estaba disfrutando.

    Ya a todo esto llevábamos como una hora entre chupadas y folladas, ya estabamos extenuados, yo estaba sin acabar y mi compañera llevaba varios orgasmos, asi que aceleré el ritmo de penetracion, hasta que solté un chorro de semen abundante en su culo, realmente era mucho, ya que llevaba un par de dias de abstinencia y realmente me habia calentado con la vieja y tras ese exquisito y abundante orgasmo, nos dimos un pequeño descanso.

    Se acomodó algo adolorida a mi lado, pero muy contenta con el rico momento que estaba pasando. Bebió su bebida y prendimos la televisión y vimos unas escenas hot de una película y en poco estabamos listos para el segundo round. Estabamos entregados a los besos y de pronto llama su marido y le contesta, diciendo que habia ido al mall y luego al supermercado. Mientras lo trataba de amor, empece a manosear a mi amante, le empecé a meter mi mano en la zorra que estilaba en jugos, mientras la dueña de esa concha se mordia los labios para que su esposo no sintiera un gemido de ella. Luego continue besandole las tetas, hasta que corto la llamada. Alli ya tenia mi pene durisimo.

    De una forma tradicional, le separé las piernas y me monté sobre ella, chupándole las tetas y se la metía a un ritmo pausado y asi seguimos follando por un buen rato, luego me separé de ella, puse sus pies sobre mis hombros y a segyir follandola. Al rato su culo nuevamente fue mío, para lo cual me monté sobre ella y para terminar con una paja rusa, en donde ella aprisionando mi pico entre sus tetas, lo chupaba y pasaba por la cara, hasta que no aguanté mas y le llene el rostro con mi leche.

    Tras eso, volvimos a descansar y de pronto me doy cuenta de que llevábamos más de dos horas y ella seguia con todas ganas acumuladas. Le propuse que nos fuéramos a duchar (ya que los dos round anteriores habían sido muy agotadores y habíamos transpirado muchísimo) y ambos queriamos aun mas sexo.

    Nos dimos una ducha muy larga, llena de manoseos y al salir de la ducha nos secamos y nos tendimos en la cama y de pronto suena el citofono y ella contesta diciendo que nos quedariamos otras 3 horas y pidio unos sándwiches y bebidas. A los minutos llegó lo solicitado, comimos y a los minutos yo estaba sobre ella, saboreando su concha, mientras ella se atragantaba con mi pene, en donde con ayuda de mis dedos y lengua, logré hacerla acabar en mi boca, disfrutando de su caliente humedad. Tras eso, me volvi a montar sobre ella y mientras la penetraba y sus tetas se movian, llega a un nuevo orgasmo, siendo tal calentira que logró en mi, que acabé en su vagina, llenándola de mi semen. Al acabar me dijo que no había cosa que mas la excitara que sentir el semen caliente en su vagina.

    Tras ese round, ya estaba algo cansado y con mis bolas bastante descargadas de semen, ya que me habia corrido varias veces en sus agujeros.

    Quedamos ambos exhaustos, completamente mojados por la traspiración y desnudos en la cama, con nuestra respiración agitada, disfrutando el placentero y morboso momento que habíamos vivido.

    La mano de ella al rato me hacia cariños sobre mi pene ya muerto, flácido y mojado con sus jugos, mientras mis manos aun acariciaban sus tremendas tetas y en minutos volvia a tenerl sobre mi disfrutando de otro intenso round de sexo… y en donde acabé nuevamente en su vagina.

    Tras esto, descansamos y conversamos de lo bien que había estado, como nos habíamos complementado y lo mucho que lo habíamos disfrutado. Me dijo que obviamente sabía que había sido solo un encuentro sexual sin ningún compromiso, pero que no me olvidará que sus piernas estarían siempre abiertas cada vez que yo quisiera pegarme un buen polvo, solo teníamos que coordinar.

    Luego nos volvimos a duchar, nos vestimos y la fui a dejar a su casa como si fuera un Uber (no sin antes comernos a besos a unas cuadras) y alli estaba un viejo de unos 70 esperandola, se bajó de mi auto y se dirigio a ese viejo. A la noche me escribe de que habia follado con el y que solo duro un minuto, pero que no se comparaba a la sesión de sexo que habiamos tenido unas horas antes. Al decirme eso, me propuso vernos ese domingo, a lo cual le respindo que ok y ese domingo en la tarde volvimos a tener una sesión de sexo similar a la del dia previo.

    Estuvimos cerca de un mes follando promedio 2 veces a la semana. Hasta que de a poco la calentura fue pasando y dejamos de hablar, pero lo caliente de que era esta veterana, es lo mas que recuerdo de ella.
     
    Jano_1993, ingmarrion, The Watcher y 2 otros les gusta esto.