Mis Relatos 08: Con 4 jovencitos, reciente he descubierto este placer. Mes de la Patria

A pedido de todos mis amigos, de los que no me conocen, de aquellos con los cuales hemos ya hablado hasta por teléfono y de los que me cuestionan.

Creo que aun todos recuerdan mi encuentro- yo vistiendo la blusa amarilla - a mediados de febrero de esta año, en un café cerca de Plaza Lyon con Sebastián (21 años, 1.85cm, atlético, cabello corto y muy bien afeitadito; con un pene grande, grueso, muy venoso, y glande muy marcado y cabezoncito) y Mauricio (de 19 años, de 1.75 y también atlético, más moreno, cabello un poco más rebelde; y su miembro más moreno, gruesa, glande bien definido, larga y gruesa, casi recta), de todo lo que hicimos después de conocernos, irnos a mi departamento y cogimos por casi toda la noche de un día jueves, y yo trabaje entre 7:30 hasta las 15hrs, muerta , como zombi. Hasta grite Viva Chile. Bien estamos celebrando la independencia, zapateando de lo lindo y les contare lo que paso hace dos semanas atrás, iniciando el día de la patria.

Con Seba y Mauro hemos cogido rico al menos 4 veces desde febrero, así que la familiaridad y confianza esta comprobada. También deben recordar que use sus nombres verdaderos en mi relato porque lo leerían, y si lo hicieron. Me llamaron a mediados de agosto para una propuesta. Después de leer el relato comentaron que quizás yo podría querer algo más. Nos juntamos a comer algo, nada de sexo esa vez y me contaron de dos amigos que querían conocerme. Me preguntaron si me parecía apropiado, yo los miré y les sonreí. Tambien me contaron que se calentaron mucho al ver mi post de fotos. Quedamos en que me los presentarían la semana siguiente, el jueves 5 de septiembre en el mismo café.

Llego el día. En eso llegaron Seba y Mauro y otro chico. Se llama Raúl, tiene 19 años igual a Mauricio. Alto y también moreno, de pelo super corto y una barba crecidita. Él también es estudiante, pero vive en Concepción y venia por unos días a Santiago. Yo extrañada del 4to chico, y de repente apareció Gabriel, un muchacho de 20 años, estudiante también, de Santiago y casi de 1,80. Yo ahí, chica y metida entre 4 jovencitos de 19, 19, 20 y 21 y el más bajo de 1,75. Ahí estaba la “chica-rica” de enseñanza media, quien lo diría. Ese día no se hizo nada, ya que me gusta conocer primero a la gente y tenía otras cosas que hacer, tampoco quería estar despierta toda la noche. Hablamos de todo y yo les dije a Raúl y Gabriel que me gustaban y que, porque no nos juntábamos el viernes como a las 6 de la tarde, ambos dijeron que rico. Sebastian y Mauricio les desearon buena suerte y yo les dije, esperen, qué onda? ¿Me van a dejar pasar una tarde con desconocidos? ¿Qué malitos? ¿Porque no nos juntamos los 5? Se miraron entre todos algo confundidos, y me miraron con cara de preguntones. Yo les dije, mi departamento es grande y cómodo. Todos con su sonrisa picaresca, se despidieron y yo quede ahí solita toda mojada. Esperando cumplir mi sueño de estar con 4 hombres a la vez.


El viernes, trabaje como siempre los viernes hasta el mediodía, tenía que prepararme y tener todo listo en mi departamento. Preparé todo para comer, unos picoteos, tragos y cositas así. Almorcé y dormí una siesta de casi 2 horas para estar a punto. Me duche, me retoque todo lo que tenía y ya cerca de las 6, me llamaron que llegaban como alas 6:30 o algo así. Me vestí, me puse una blusa delgada de color rojo (como la de la foto), casi transparente sin sostén, una falda de color rojo oscuro y mis medias y tacones, por supuesto y como siempre sin nada debajo de la falda.

Llegaron y ahí estaban mis jovencitos, Sebastian y Mauricio (mis adorables chicos del febrero y otras oportunidades) y Gabriel y Raúl (mis nuevas adquisiciones). Al comienzo ellos nerviosos, yo también. Puse música, tomamos algo suave y comimos una que otra cosita, entonces me senté entre Raúl y Gabriel.

Les dije que si les gustaba estar conmigo, que si querían quedarse y si habían leído mis relatos. La respuesta fue mas que obvia. ¿Después les dije y se tocaron por mí? Si Sole, a cada rato y cuando Seba y Mauro nos propusieron conocerté quedamos más que calientes. Puse mi cara más tierna y devoradora posible, y bese a Raúl con mucha lengua y me gire después a Gabriel y repetí, mis manos no descansaron y los toque por todos lados. Seba y Mauro, ya estaba calientes y note que se tocaban su pene y se reían de excitados. El departamento con luces algo bajas, música rica y yo con cuatro jovencitos. Les abrí la camisa a ambos (adoro los hombres con camisa) y los acaricie en el pecho. Raúl algo más peludo, pero Gabriel se notaba depilado recientemente. Mis manos en sus abdómenes, sus tetillas y acariciándolos con muchas ganas, mi boca se fue a sus pezones, a chuparlos, a morderlos, a lamerlos y de nuevo a su boca o al otro chico. Así los tuve como 20 minutos solo mis manos mi boca y el torso de los dos a mi disposición. Ellos comenzaron a meterme manos y me abrieron mi blusa roja, antes de esto ya estaban con ojos desorbitados ya que se me notaban los pezones súper duros y parados. Entre los dos me chuparon las tetas y los pezones, que ricos ambos, super calientes y yo, para que les digo.

De ahí, me pare y me quite solita la falda, y todos gritaron un aclamado “ohhhhh”, y se me lanzaron prácticamente encima y me deje querer rico. Raúl y Gabriel, me tomaron por todos lados, me chuparon, mientras Seba y Mauro me apretaban por detrás. Ya perdí la cuenta de todas las tocaciones y chupadas que me hacía, 4 bocas, 4 lenguas, 8 manos, 40 dedos en mi pobre cuerpecito. Así que pensaba, como la primera vez: todo sea por la patria. Yo tocada por todas partes, tenia una boca en la mía, otras en mis tetas, otra en mi culo y la otra en mi conchita (¿depilada a laser, recuerdan?). Yo tocando, chupando y mamando lo que encontraba, en eso se quitan toda la ropa, bueno el pantalón ya que las camisas habían volado hace rato.

Ahí tenia a Seba y Mauro mis conocidos, vi después a Raúl una verga morena, dura, no tan grande y muy delineada, quizás unos 17 cms, el más chiquito de todos. En cuanto a Gabriel, quede con la mandíbula por el suelo: un pene grueso y grande, quizás de unos 23 cms, algo curvo hacia arriba, grueso, moreno, pero de glande hermoso y se notaba que lo lucia con orgullo. Volví a pensar en los patriotas al imaginarme el sacrificio que vendría.

Me arrodillé y comencé a comerlos uno a uno, a Seba y Mauro los devoré deliciosamente, los humedecí rico con mi saliva mientras agarraba con mis manos a Raúl y a Gabriel. Los masajeaba rico y los sentía super duros, entre todos me afirmaban la cabeza o apretaban las tetas, yo solita arrodillada me fui a la de Raúl, la chiquita, pero sabrosa. Es rica una así, ya que te la metes entera y no te da arcadas. Me lo trague hasta la raíz mientras masajeaba a los otros. Y venia el premio mayor, Gabriel y su enorme pene. Lo tome y los otros tres se echaron para atrás como para mirar que hacía yo. Lo agarré entre mis manos, lo acaricie, lo lamí, lo bese y parecía que crecía más y más. Sentía como esa poderosa verga quería conmigo todo. Puse mi carite en ella, sentí su olor, su textura y sus venas marcadas en mi cara, agarre su glande y lo metí a mi boca, tuve que esforzarme algo para que entrara todo, pero siempre puedo, siempre llego a la meta como en la Teletón (cuando vean la Teletón este año, se acordaran de mi). De a poco me la fui metiendo más y más, hasta más de la mitad, apenas podía más porque además de larga era gruesa. Pero, siempre me esfuerzo, cuando entraba y entraba, los otros chicos me avivaban y me decían cosas como: vamos Sole, tú puedes, te gusta la verga de Gabriel, métetela toda dentro, apriétala, gózala, chúpala más fuerte, métela y sácala. Yo a todo los miraba y asentía con mi cabeza. Claro, mi boca apenas permitía la entra de aire, menos podía hablar.


Ya llevábamos casi más de una hora en este juego desde los primeros besos, y Raúl se puso detrás, me levanto el culo y me penetro por mi vagina. Yo recibiéndolo rico mientras en mi boca el pene de Gabriel, Sebastian y Mauricio me tocaban las tetas y me besaban por todas partes. Raúl me la metía y sacaba rico, después fue el turno de Mauro y me culeo rico también mi vagina, cada vez más mojada, finalmente siguió Mauricio y sentí su poderoso miembro entrar fuertemente en mi conchita, grité apenas como pude con mi boca aprisionada por el pene de Gabriel (increíble un chico de 20 años con algo tan rico, largo y grueso, nadie se lo imaginaria). Yo, como siempre, en la gloria, cogiendo con jovencitos y 4 para mi solita por primera vez. Entonces me lo quité de la boca y le pedí a Gabriel, te toca. ¿El miro y casi todos dijeron, segura Sole? Yo solo me mordí los labios y puse mis ojos casi blancos. Me pusieron en 4, Mauro, Seba y Raúl me tenían tomada suavemente en el sofa. Yo en 4 y de piernas abiertas mientras me tocaban, me manoseaban a su gusto, Seba me puso su verga en la boca y yo la chupe. Mientras Gabriel apuntaba con su glande en mi conchita ansiosa y asustada.

Entre Seba, Mauro y Raúl me acariciaban como preparándome para lo que venía. Yo más ansiosa y caliente, miré a Gabriel y le dije que espera tontillo, si no es ahora no es nunca. Apuntó mejor y sentí su glande poderoso entrar lentamente en mi vagina, mis labios palpitaban, yo temblaba entera, me lamia los labios, apretaba la verga de Seba y sentía los pezones siendo apretados y mordidos por Raúl y Mauro. A sus 20 años, Gabriel sabe cómo penetrar una mujer ya que su enorme pene es de otro mundo, el empujaba de a poco dejándome a mí el trabajo. Me echaba hacia atrás y en cada suave empujón su pene entraba y yo sentía mi vagina estrecharse, apretarse y hasta sentir la carne con algo de dolor, yo super mojada, Gabriel me miraba y me tenía agarrada de la cadera mientras empujábamos los dos. De a poco, lentamente pero fuertemente su miembro me atravesaba, sentía en mis carnes su piel, su contorno, yo apretaba mi vagina y sentía el dolor de su fuerza entrando, de a poco empujábamos los dos, el para adelante y yo hacia atrás. Seba se había salido y ahora tenia a Raúl y a Mauro en mi boca, dos penes en mi boca, mi paraíso adicional a todo lo que he vivido, se unió Seba también y yo comiendo 3 penes mientras mi adorado Gabriel me penetraba y jugaba con su enorme herramienta entrando y saliendo, saliendo y entrando, cada entrada era un poco más profunda.

Yo mire suplicando a Gabriel por más y el comenzó a hacerlo más profundo, cada vez más, pero siempre suave para no hacerme daño. Yo ya no estaba preocupada de nada, ya estaba ahí con 4 jovencitos. Gabriel me susurra desde atrás, Sole, Solcita, como te sientes. Yo le digo caliente amor, caliente mientras me comía los otros 3 penes. Quieres todo adentro, aun no llegamos a la mitad amor, mi sol, mi Solcita maravillosa, mi madurita caliente. Yo abrí los ojos, y pensar que creía que tenía todo adentro. Le casi grite, que no parara. Gabriel comenzó mas y mas profundo, yo lo sentía entrar, creí que me desmayaría de placer, ya no era dolor, sino dolor y placer al mismo tiempo. Dale, Gabriel, sigue hasta lo que podamos, apenas balbuceaba yo. Seba quien también dirige mucho, le decía a Gabriel que me rompiera toda pero suavemente, no te detengas Gabo le decía, Solcita es muy puta y siempre le gusta esto. Mauro asentía y le avivaban la cueca a Gabriel (viva Chile, ¿no?). ¿Puedo? Me pregunto Gabriel insinuando el último empujón, y yo le dije soy tuya.

En ese momento, solo me abandonee a gozar y siento el empujón más profundo de mi vida en mi vagina y grite como loca, como siempre que grito de placer, pero mi grito se ahogó ya que tenía al menos dos penes en mi boca. El miembro de Gabriel ahora todo dentro, me tenía a su merced, me tenía ensartada y adolorida, pero muy caliente. Comencé entonces yo a moverme para acomodarme más y más. De a poco el dolor se fue y solo sentía su pene en mis carnes mojadas, in mi interior lubricado entrando y saliendo, salía solo a la mitad ya que yo le gritaba que no quería que lo sacara: culéame, Gabito, no lo saques, mételo más adentro, afírmame las caderas, que rico mi lindo monstruo, dale, no pares, empuja hasta el fondo. Eso hacia Gabriel, me ensarto todo hasta el fondo, sentía cada milímetro de mi vagina y mas tocada y apretada a su pene. Los otros chicos ya estaban tan calientes, que Seba y Raúl ya se tocaban algo, los vi darse un beso y yo me encendí más y más. En eso, Mauro se va hacia mi culo y me come el culo con su boca y lengua. Mientras Gabriel entraba y salía a mis instrucciones: no lo saques todo amor, empújame, apriétame, penétrame hasta mi pecho. Mire hacia atrás y veo a Mauro lamiéndome el culo y con su carita muy cerca del monstruo de Gabriel, yo super caliente.

Seba y Raúl ahora se besaban, y sus penes en mi boca, yo apenas afirmada al sillón, pero ellos me ayudaban. Mientras Mauro más caliente me metía dos dedos en mi culo y me echaba mas saliva y de repente rozaba la verga de Gabriel. A ratos yo volteaba y miraba como se acercaban peligrosa y ricamente. Gabriel comenzó a gemir más y más, y se puso más fuerte en sus empujones y yo hacia atrás gritándole que rico. Mas fuerte, nada de dolor, yo como loca me comía la verga de Gabriel, la de Seba y Raúl y los dedos y lengua de Mauro. Mas y más, entonces Gabriel pega un grito y siento su chorro de semen espeso inundar mi concha, mientras yo mas y mas lo apretaba hacia mí. Casi al mismo tiempo, Seba y Raúl que se besaban y me metían sus penes en la boca, gemían más y más. Así, con Gabriel acabando en mi concha, llenándome de semen la vagina, yo me movía más y más rápido y mamaba a los otros chicos. Sentí sus penes apretados y los dos me lanzaron sus chorros de semen en la cara y en mi boca, salpicándome entera, yo los lamia y chupaba y mi cara inundada de semen. Por casi 5 minutos me los chupe y tenia a Gabriel en mi concha, le miro a Mauro quien jugaba con sus dedos y le digo que esperas bebito. El se montó entre Gabriel y yo, quien se echo como un poco para atrás para que Mauro se acomodara y me apuntalo en mi culo con su pene de casi 18 cms. Así, ya tenia dos penes lechosos en mi boca, otro gigante lechando en mi conchita y ahora a Mauro penetrándome el culo, por otros a 5 minutos me culiaron rico entre todos, mas Mauro que estaba por acabar, entre Gabriel y Mauro, me metían todo por detrás. Yo ya sentía nuevamente ese dolor incomodo de la primera penetración anal de la noche, pero estaba tan caliente que paso rápido, Mauro estaba montado en mi culo y Gabriel en mi concha, yo diría que es difícil pero Mauro casi estado en el abdomen de Gabriel culiandome, de echo Gabriel lo afirmaba y lo acariciaba, También me percate que le besaba el cuello y de repente en la boca. Yo como loca, 4 jovencitos culiendome y tocándonos entre todos. Mauro grita ahora y me da un empujón hasta casi el fondo y acabo en mi culo. Ahí quedaron los 4 casi muertos, y yo ensartada por todos a lados. Me retire lentamente.

Mi cara estaba inundada de semen de Raúl y Seba, mi concha por Gabriel, mi culo por Mauro y entre todos comenzamos a besarnos y lamernos por todos lados, Seba en mi culo lamiendo el semen de Mauro, Raúl en mi concha haciendo lo mismo con el semen de Gabriel y este con Mauro en mi boca ahora. Nos recostamos y nos besamos por casi 15 minutos, intercambiamos los fluidos y todos empapados y yo les dije que onda, ¿solo ustedes gozan?

Ahí, me la metieron de nuevo, ahora Seba en mi culo y Raúl en mi vagina, mientras Gabriel me volvía a culear la boca. Ahí estaba nuevamente Sole, Solcita, la “chica-rica” ensartada nuevamente y mamando y chupando una verga enorme y otra regular. Ahora yo de espalda, recostada sobre Seba y el me culiaba por el culo, mis piernas abiertas y Raúl en mi concha, Gabriel a un lado y Mauro al otro en mi cabeza. Me cambiaba de verga a verga. Como estaba sobre el cuerpo de Sebastian, mientras el me culeaba el culo, él podía abrazarme así que ponía su mano en mi clítoris mientras Raúl me penetraba la vagina. De nuevo, Sole, Socita culiando rico nuevamente, ahora con 4 jovencitos. Mi paraíso, mi nuevo paraíso, Seba me acariciaba ahora fuertemente el clítoris y de paso pasaba a llevar el pene de Raúl, yo comencé a temblar y temblar. Y gritando me di un orgasmo fantástico, tiritando, temblando en todo mi cuerpo, entre los 4 me afirmaban y no paraban de culiarme. Todos saben esa sensación de gozar y temblar, quieres parar, pero no quieres, quieres que te lo saquen peor no lo quieres. Yo no quería parar, era demasiado rico para parar. Así, mis jovencitos siguieron a mi pedido, no paren, no paren, Seba siguió en mi clítoris y a los 5 minutos de nuevo goce super rico y más fuerte que la vez anterior. Después cambiamos algo.

Me tomaron en brazos entre los 4 y me llevaron a la cama, ahí se acostó Gabriel y su verga dura y parada me invito. Me paré encima de él, mirando hacia sus pies, me agaché y puse su glande en mi culo, que ya había sido penetrado por los otros 3 en diferentes momentos en el sillón. Claro, todos me preguntan si estoy segura., yo que iba a pensar?

Me acomodo y pongo el glande de Gabriel, mi monstruo, en la entrada de mi culo. Y de nuevo, él me dice Solcita tu diriges. Yo me senté y comencé a presionar y el dolor que sentí fue de otro mundo, su glande abriendo mi ano lubricado (eso sí, me echaron algo antes) y yo como más puta que nunca, comencé a dejarme caer de a poco y mientras sentía el pene de Gabriel entrar suavemente con dolor y placer, los otros me acariciaban y besaban. Yo me deje caer más y más y de repente ya lo tenía a la mitad, me llene de lágrimas entre dolor y placer, los otros chicos me lamian la cara, me mordían las tetas, me apretaban, y me besaban. Seguí sobre Gabriel y más y más, él me decía, mi Solcita puta sigue tú, vamos putita, dale todo hasta dentro, es tuya, cómetela por el culo. Yo más caliente, una verdadera puta sentándome en tremenda verga, Gabo me tenía a su gusto, veía como me entraba su pene en mi culo, de repente alguno de los otros chicos miraba y entre todos me animaban. Me daban una que otra nalgada, me seguían acariciando y Gabo entraba y entraba, hasta que de repente me grita: Solcita, Sole te pasaste, ¿yo miro y digo que? Él me dice te lo tragaste todo, te pasaste. Si, los otros chicos se acercaron y claro, yo tenía los casi 23 cms todos dentro de mi culo, lo mejor que ya no sentía tanto dolor solo placer, placer cada vez más fuerte y caliente. Todos casi me aplaudieron.

Yo acuchillada por un pene de 23 cms, sentada sobre él, en mi culo. Me quede un momento ahí disfrutando el momento. Cerré los ojos y sentía solo el pene enorme en mi culo, comienzo a moverme de a poco, adelante y atrás, un poco arriba, de nuevo para abajo, y así ara todos los ángulos. Mi culo se relajo y ahora solo sentía placer, quizás dolor, pero ya no importaba. Me eche hacia atrás un poco, y los otros chicos me besaban toda, sentía sus manos y bocas en cualquier parte, en eso mientras me echaba hacia atrás, mi espalda casi en el pecho de Gabriel, Seba y Raúl me toman las piernas y me las levantan pera que Mauro me culiara ahora en mi vagina. Se puso ahí, y entro lentamente, yo le grite no me hagas sufrir. Y me la metió de una. Yo volví a gritar, no sé cuántas veces lo hice esa noche. El enorme miembro de Gabriel en mi culo, 23 cms en mi culo y el de Mauro con sus casi 19 cms en mi vagina, ensartada nuevamente. Y ahí la cosa no para más, ya nada de dolor solo goce, me culiaron rico por largos minutos, yo ensartada por Gabriel, él se movió hacia arriba y yo sentía su empujón rico y fuerte en mi culo, Mauro en mi vagina, el sigue y sigue hasta que tiembla y acaba rico dentro de mi conchita, bombea un poco más y hasta que se sale, viene ahora Raúl y me culea también la vagina. El del pene más chiquito fue casi un descanso. Me culeo hasta que acabo super rápido y me lleno de semen, aunque no tanto como al comienzo. Ahora le tocaba a Seba, de casi 20 cms y gruesa, yo dije acá me muero y pensé en nuestra bandera nunca arriada ante el enemigo. Ahí me tenían, a la chica-rica del Liceo, culiada por el culo con un pene de 23 cms y en la vagina por otro de 20cms Les confirmo porque después los medimos. Entre Gabriel y Sebastian me destrozaron, me apretaban, pero yo seguía ahí, estoica ante el embate de la adversidad. Después me dijeron que yo era la que más gritaba y se movía. Así me dieron duro por otros 5 o 10 minutos y Gabriel acabo en mi culo: ¡ay! que cristiano tan lechoso detrás acabo Seba en mi concha. Ahí inundada y penetrada, encima de Gabriel y con Seba encima mío nos quedamos, mientras oh sorpresa, Mauro y Raúl hacían un rico 69. Yo ni cuenta me había dado, al salirse Seba y Gabriel, los otros me chuparon el culo y la vagina y comenzamos el besuqueo entre todos, yo también acabe más de una vez en esta última parte. Nos abrazamos, y como siempre no dejo que nadie ase duche, para que los olores queden.

Nos juntamos como a las 18:30, ya eran casi las 10 de la noche y mis 4 adonis me había cogido entre todos no sé cuántas veces. Lo que vino después fue más locuras, pero no creo que quieran aburrirse. Nos dormimos como a las 3 de la mañana. Ven, por eso es bueno tomar una rica siesta antes, más cuando sabes que estarás carreteando. Después de despertar como a las 10 de la mañana del sábado, volvieron a darme entre todos, pero como siempre, estas actividades después de tanta acción me gustan más tiernas y suaves, no siendo menos calientes.

Espero que les haya gustado.


No de ese dia, pero veran como me comporto.

 

Ya me lo dijo mi rey. Gracias nuevamente.

 

Mis relatos son mis experiencias reales que he tenido desde los 13 años.

 

Aaaaaaaaaahhhhh!
Mmmmmmmmmm!

 

Esos libros son de hace casi 150 anos el primero, y el de la princesa de casi 228 años. Yo soy de esta época, pero sería increíble me citaran en 150 años. Pero, dejémoslo así para que disfruten aca.