Muere la actriz Kelly Preston, esposa de John Travolta

La intérprete fallecida este domingo a los 57 años tras batallar contra el cáncer de mamas tuvo una carrera irregular, con títulos como Gemelos y Jerry Maguire, y un complejo pero extenso matrimonio con el actor de Pulp fiction.

Kelly Preston: la turbulenta vida de la actriz junto a John Travolta


En enero 1989 la comedia The experts no marcó un impulso crucial en la filmografía de Kelly Preston, por entonces una veinteañera actriz que un mes antes había tenido su rol de mayor relevancia en Gemelos junto a Danny DeVito y Arnold Schwarzenegger. Tampoco energizó particularmente la de John Travolta, inmerso en un momento gris de su carrera luego de los éxitos de fines de los 70, Grease y Fiebre de sábado por la noche.

Dos años antes, en 1987, las pruebas de cámara de la película les permitieron conocerse. Preston se acababa de divorciar de su primer marido, el actor Kevin Gage, y Travolta no tenía relación conocida. Eso sí, previo a convertirse en esposos, la actriz fue pareja de George Clooney y de Charlie Sheen, con quien llegó a estar comprometida y tuvo un extraño incidente, en que ella recibió un disparo en el brazo supuestamente de manera accidental.

Tras casarse en septiembre de 1991, el matrimonio Travolta-Preston se mantenía como una de las parejas más longevas de Hollywood, hasta que este domingo la intérprete nacida en Hawái falleció por complicaciones derivadas de un cáncer de mamas detectado hace dos años. “Al optar por mantener su lucha en privado, ha estado recibiendo tratamiento médico por algún tiempo, con el apoyo de su familia y amigos más cercanos”, informó el representante de la familia a la revista People ante la muerte de la intérprete a los 57 años.



Integrantes de la Cienciología, la pareja había mantenido una permanente colaboración en la pantalla grande, incluso en este siglo, con la comedia Papás a la fuerza (2009) y en Gotti (2018), donde ambos encarnaron al mafioso John Gotti y a su esposa, Victoria. Esta última debutó fuera de competencia en el Festival de Cannes –mientras Travolta también festejaba las cuatro décadas de Grease–, pero fue recibida no sólo como una de las peores películas de la historia del evento, sino que también como uno de los mayores desastres de la carrera de ambos y de los estrenos de ese año.

En esa ocasión, en la Costa Azul, aprovecharon de revisar su historia y sus momentos más complejos. “El próximo septiembre celebramos 27 años de matrimonio y eso en Hollywood es como 67 años”, decía la actriz a El País en sus actividades de prensa ante el debut de la cinta.

Lo cierto es que la pareja había vivido toda clase de dificultades, quizás como pocos nombres en la industria estadounidense. En enero de 2009 perdieron a los 16 años a su hijo mayor, Jett. El joven, que sufría el síndrome de Kawasaki (una rara enfermedad mal que genera la inflamación de los vasos sanguíneos), falleció luego de un episodio convulsivo en la ducha y mientras la familia estaba de vacaciones en Bahamas.

“Creo firmemente como madre, al igual que mi esposo, que hay ciertos factores determinantes que producen al autismo. Y algunos de ellos son en gran medida los químicos presentes en nuestro medio ambiente y en nuestra comida”, dijo la actriz a fines de 2012 al programa de CBS The doctors, en su primera entrevista sobre la muerte de su hijo y donde reveló que este padecía autismo. También agregó que procuraba mantener un estilo de vida orgánico y libre de químicos con sus otros hijos, Ella y Benjamin, entonces de 12 y 2 años, respectivamente, de quien se convirtieron en padres en 2010.

Una temporada particularmente caótica vivieron en 2012, cuando aparecieron múltiples acusaciones de hombres en contra de Travolta, detallando situaciones de acoso y abuso sexual. Entre ellos, dos masajistas lo denunciaron por agresiones sexuales, una en enero en un hotel de Beverly Hills y otra durante el mismo mes en Atlanta. Hechos que siempre fueron negados por el actor a través de sus abogados.

Pese a los rumores, el matrimonio se mantuvo inquebrantable y unido a su vínculo a la Cienciología. Después que la actriz hiciera Jerry Maguire (1996) con Tom Cruise –otro conocido cienciólogo– y Jack Frost (1998) con Michael Keaton, la pareja el 2000 protagonizó Batalla final: Tierra, adaptación de la novela de ciencia ficción L. Ronald Hubbard, fundador de la religión. Un proyecto que Travolta intentó llevar a la pantalla durante años.

Recordado hasta el día como uno de los mayores desastres de la historia del cine, el filme siempre fue motivo de orgullo por parte de la pareja. A diferencia de otras estrellas, como el mismo Cruise, nunca escondieron su pertenencia a ese credo.

Ante la muerte de Preston, Travolta volvió a recurrir a su cuenta personal de Instagram, tal como cuando celebraron 28 años de casados en septiembre pasado. “El amor y la vida de Kelly siempre serán recordados. Me tomaré un tiempo para estar con mis hijos que han perdido a su madre, así que perdón por adelantado si no tienen noticias nuestras por un tiempo. Pero tengan en cuenta que sentiré su derramamiento de amor en las próximas semanas y meses a medida que nos curamos”, escribió.