Hoy, mal introducida con la esfera su casa, al sol los pasos le desvía, y es tropezón de estrellas; y algún día, si fuera más capaz, pocilga fuera.
«Tras vos un Alquimista va corriendo, Dafne, que llaman Sol ¿y vos, tan cruda? Vos os volvéis murciégalo sin duda, Pues vais del Sol y de la luz huyendo.
»Él os quiere gozar a lo que entiendo Si os coge en esta selva tosca y ruda, Su aljaba suena, está su bolsa muda, El perro, pues no ladra, está muriendo.