Restricciones de Covid-19 se han utilizado para destruir las libertades civiles en todo el mundo

Las restricciones de Covid-19 se han utilizado para destruir las libertades civiles en todo el mundo, advierten los grupos de derechos

• China ha impuesto confinamientos estrictos, exámenes masivos y vigilancia de aviones no tripulados.
• Dos confinamientos en Francia significaban que la gente tenía que rellenar papeleo para salir.
• En Nigeria, la represión de las protestas contra las restricciones dejó varias personas muertas.

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Las restricciones del Covid-19 han restringido las libertades civiles en todo el mundo con regímenes autoritarios que explotan las restricciones como una forma de reforzar su control de las sociedades en rápido cambio, dicen los grupos de derechos.

Se han prohibido las manifestaciones, se han pospuesto las elecciones y los activistas han sido objeto de una represión aún mayor en una emergencia sanitaria cuyo impacto político se seguirá sintiendo cuando la pandemia haya terminado.

En China, donde el virus surgió por primera vez pero que ahora se ha mantenido en gran medida bajo control, las autoridades han adoptado medidas sumamente coercitivas, con el confinamiento estricto de zonas muy extensas, la detección masiva y la vigilancia mediante aviones teledirigidos.

En Guinea, el gobierno ha prohibido todas las manifestaciones hasta nuevo aviso, citando la lucha contra el Covid. Hungría está en estado de emergencia hasta febrero, mientras que en Nigeria, la represión de las protestas contra las restricciones dejó varios muertos.

Bolivia aplazó sus elecciones generales durante varios meses y en Francia los ciudadanos tuvieron que rellenar un formulario antes de que se les permitiera salir de sus casas durante dos confinamientos que duraron más de tres meses en total.

Según el Instituto Internacional para la Democracia y la Asistencia Electoral (IDEA / International Institute for Democracy and Electoral Assistance), con sede en Suecia, el 61% de los países han aplicado medidas para frenar el Covid-19 “que eran preocupantes desde el punto de vista de la democracia y los derechos humanos”.

“Ëstas violaron las normas democráticas porque eran desproporcionadas, ilegales, indefinidas o innecesarias en relación con la amenaza a la salud”, dijo en un informe.

IDEA dijo que aunque estos acontecimientos preocupantes eran menos comunes en las democracias, “todavía estaban bastante extendidos”.

La jefa de la ONU para los derechos humanos, Michelle Bachelet, también ha advertido que aunque muchos estados han adoptado medidas justificables y temporales “también ha habido casos profundamente preocupantes en los que los gobiernos parecen estar usando el Covid-19 como tapadera para las violaciones de los derechos humanos”.

El grupo de libertad de prensa con sede en París, Reporteros sin Fronteras (Reporters Without Borders), dijo en un informe sobre el año 2020 que las medidas de emergencia adoptadas para hacer frente a la pandemia “contribuyeron visiblemente a un bloqueo informativo” y dieron lugar a la detención o encarcelamiento de periodistas.

Según la ONG estadounidense Freedom House, “la condición de la democracia y los derechos humanos ha empeorado en 80 países” desde que comenzó la pandemia.

En Sri Lanka, el gobierno “aceleró su agenda autoritaria… intensificando los esfuerzos para controlar los reportajes independientes y los discursos desfavorables, ordenando el arresto de cualquiera que critique o contradiga la línea oficial” sobre el Covid, dijo.

“Hemos visto en los últimos meses al Presidente consolidando el poder”, dijo Bhavani Fonseka, investigadora principal del Centro para la Política Alternativa en Colombo, denunciando un “debilitamiento de los controles y equilibrios (checks and balances)”.

En Egipto, donde el presidente Abdel Fattah al-Sisi es acusado por los activistas de liderar un régimen autoritario que ha encerrado a decenas de miles de opositores, la pandemia fue una oportunidad para apretar aún más las libertades.

La pandemia “sólo ofreció al presidente un nuevo aspecto para aprobar y promulgar una legislación opresiva que o bien afianza aún más las prácticas preexistentes o bien introduce nuevas condiciones más duras para los ciudadanos de a pie”, dijo la investigadora Hafsa Halawa en un informe conjunto del Consejo Atlántico y los grupos de reflexión del ISPI.

Un informe del Consejo Europeo de Relaciones Exteriores, (ECFR / European Council on Foreign Relations) dio la alarma sobre la respuesta de los estados de la ex Yugoslavia en los Balcanes occidentales.

Los gobiernos de esos países han adoptado a menudo “enfoques selectivos y arbitrarios para aplicar restricciones” y a veces han utilizado “estas medidas para acallar a sus críticos y oponentes”, decía.

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Pero el impacto sobre las libertades no se limita a los regímenes autocráticos. También se siente en las democracias liberales, aunque de forma menos flagrante.

Las restricciones impuestas durante gran parte de este año habrían sido impensables para la mayoría de los europeos incluso en enero.

"Los poderes de emergencia conllevan un riesgo de abuso de poder por parte del ejecutivo” y de permanecer en vigor incluso una vez que la emergencia haya terminado, lo que significa que se requiere “una supervisión parlamentaria y judicial apropiada” para limitar el riesgo, dijo el Parlamento de la UE en noviembre.

El filósofo italiano Giorgio Agamben ha argumentado que “la creación voluntaria de un estado de emergencia permanente -aunque no se declare en el sentido técnico- se ha convertido en una de las prácticas esenciales de los estados contemporáneos, incluidos los supuestamente democráticos”.

"La emergencia sanitaria declarada en Francia para luchar contra la pandemia puede compararse con el estado de emergencia impuesto a raíz de un atentado terrorista", dijo Laureline Fontaine, profesora de derecho público de la universidad Sorbonne Nouvelle.

“Nos hemos acostumbrado a vivir sin libertad”, dijo.

Incluso una vez que las vacunas u otros factores logren detener la propagación del virus, las consecuencias económicas de la pandemia podrían alimentar el descontento, lo que a su vez podría provocar más restricciones.

No es “ninguna sorpresa” que en Rusia la frustración con el gobierno del Presidente Vladimir Putin esté creciendo a medida que las consecuencias económicas de la pandemia agravan una década de estancamiento.

“Las consecuencias de segundo y tercer orden de las perturbaciones y desplazamientos provocados por la pandemia pueden ser dramáticas”, argumentaron Andrei Kolesnikov y Denis Volkov en un estudio para el Centro Carnegie de Moscú.

En el Medio Oriente, la pobre respuesta de las autoridades estatales a la pandemia y el fortalecimiento de las prácticas autoritarias “es muy probable que amplifique la dinámica y las razones del descontento”, advirtieron en su informe el Consejo Atlántico y el ISPI.

Esto transformará la crisis del coronavirus “de una crisis sanitaria a una crisis económica y política”, dijeron.

Fuente: Covid-19 restrictions have been used to destroy civil liberties around the world, rights groups warn

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