Toby, ¿te estas quedando calvo?, revisa estas estrategias para combatirlo.

Toby, ¿Te estás quedando calvo? Tranquilo: no está todo perdido. Combate al enemigo con eficacia... y aprende a rendirte con dignidad.






1. Descubre la causa


No todas las calvicies son iguales ni todas son genéticas. Una cosa es tener unas entradas galopantes y otra muy diferente perder pelo por todo el cuero cabelludo. El segundo caso acostumbra a indicar un problema de salud: carencias hormonales, problemas de tiroides, falta de hierro o de proteínas. Así que antes de culpar a tu padre haz el favor de pedir cita al dermatólogo en cuanto empieces a atascar la ducha. En algunos casos, te practicarán una biopsia del cuero cabelludo para descartar males mayores. Lo mejor es que acudas a un dermatólogo especializado en alopecia.






2. Confía en la ciencia


La mayoría de los productos que prometen pobladas cabellera no vienen respaldados por ningún estudio clínico. Así que confía sólo en los fármacos que han recibido la aprobación de las autoridades sanitarias: la finasterida (Propecia) y el minoxidil (Rogaine). Y ten en cuenta que ambos son más útiles para conservar lo que se tiene que para recuperar lo perdido


La finasterida trabaja impidiendo la conversión de testosterona en DHT, lo que es realmente útil para dejar de perder cabellos; mientras que el minoxidil se supone que estimula el crecimiento capilar, aunque los científicos no están muy seguros de cómo lo hace. Lo que ocurre es que mucha gente no sabe emplear correctamente el minoxidil. Tienes que usarlo al menos dos veces al día, y al menos durante seis meses, para apreciarlo.






3. Cambia de champú


Decenas de champús prometen premiar a tus cabellos con un aspecto de mayor espesor, y algunos funcionan, pero no todos. Sin embargo, hay un ingrediente que parece que es muy de fiar. El ketoconazol, antifúngico usado contra la caspa, puede ayudarte a conservar el pelo reduciendo la producción de testosterona (y, por tanto, de DHT) en los folículos capilares, tal como ha observado un grupo de científicos de la Universidad British Columbia (Canadá). De hecho, en un estudio belga, un grupo de hombres con calvicie incipiente que usaron un champú con un 1% de ketoconazol dos o tres veces por semana durante seis meses redujeron en un 17% la pérdida de cabello.







4. Come mejor


Una dieta saludable también puede ayudarte a no acabar como Don Limpio. Evita los fritos; eso puede reducir la actividad de las glándulas grasas, retardando la transformación de testosterona en DHT, según una investigación realizada en India. Y cuidado con los postres: el subidón de insulina puede desencadenar una mayor secreción de testosterona, lo que
facilitaría la conversión a DHT.






5. Busca la luz


En 1967, un científico disparó un láser contra la piel afeitada de unos ratones para ver si la luz causaba cáncer. El láser no activó el cáncer, pero sí el crecimiento capilar. Eso llevó a una terapia luminosa de bajo nivel, tratamiento aprobado por las autoridades sanitarias para casos de alopecia masculina de leve a moderada. En un reciente estudio coreano, los pacientes con alopecia que se ponían un casco de fototerapia en casa de forma regular observaron, al cabo de 24 semanas, un aumento del 22% en el espesor del cabello, y del 15% en la densidad del mismo.








6. Haz un cambio radical


Los hombres con calvicie incipiente tienden a afrontarla de tres maneras: la compensan cuidando más su forma física o vistiendo a la moda, evitan los espejos o simplemente aceptan los cambios en la azotea. La aceptación (que no resignación) reduce el estrés producido por la pérdida de cabello, mientras que las otras estrategias lo aumentan, tal como ha revelado un estudio alemán. Y eso influye mucho en la imagen que das de ti mismo. Así que replantéate la situación: interpreta la calvicie como una imagen personal o como una señal de madurez en lugar de enfrentarte a ella como un síntoma que demuestra envejecimiento.


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Fuente​

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