Pituteando de profe (parte II)

Continuación de la historia de Sandra, la chica lisiada a quién desvirgué cuando le hacía clases particulares. (link https://www.portalnet.cl/temas/pituteando-de-profe.1523754/ )

Después de haber estado con ella, en donde tuvimos sexo por primera vez, llegó el fin de semana en donde pensé mucho de lo sucedido con Sandra, me cuestionaba si estaba bien o no (en ese momento no tenia pareja, pero Sandra no me excitaba como mujer, si no que la situación me generaba mucho morbo), por lo cual, después de mucho pensar, me decidi por conversar directamente con ella, antes de que existan sentimientos por parte de cualquiera de los dos, ya que en ese momento no me importaba tener una relación de pareja, aunque no niego que me importaba saciar mi apetito sexual con ella, ya que solo el tema de follarla me excitaba muchisimo.

Y llegó el día lunes, a las 9am llegó ella con su mamá (temia que le hubiera dicho a su mamá y asi tener problemas) y Sandra sonrió al verme y supe de inmediato que esa mañana vendria una larga sesión de sexo. Aunque yo quería conversar con ella, me dice que la bese y la conversación pasa a ultimo plano, ya que en ese mismo instante nos empezamos a besar y la levanté de su silla de ruedas, abrazada a mi y sin dejar de besarnos llegamos hasta mi cama y rápidamente nos empezamos a desnudar. Le quité su sueter, una polera y asi en poco quedamos desnudos y al verme desnudo y con mi pene erecto, me dice:

- Métemela que vengo mojada desde casa esperando verte.

Eso me excitó de sobremanera, pero puse unos cojines en el piso, la tomé de la cintura, ella se agarra de mis hombros, le separé un poco los muslos, me puse al medio de estos y se lo metí de una y de manera fuerte, sacando de ella unos gemidos muy fuertes y de una siento como se humedece mucho y sus gemidos la delatan que había llegado al orgasmo. Luego empecé con frenesí a penetrarla, la agarré de los hombros y se la metía con fuerza, sintiendo como los testículos me chocaban en sus nalgas y con ese mismo ritmo volvió a sentir varios orgasmos y cuando yo iba a tener el mío saqué mi pene de su concha y me dice:

- Quiero que me des la leche en la boca.

Me puse sobre ella y empezó a engullir mi pene y de pronto descargue todo mi semen en su boca y se bebe hasta la última gota de mi leche y continúa besando y lengüeteando mi pene por unos minutos.

Y así pasaron varios días en donde follabamos (sin condón) y luego estudiábamos. En realidad lo pasábamos muy bien, ella llegaba con facilidad a los orgasmos y Sandra disfrutaba mucho, y yo la cuidaba, en todos los aspectos, incluso en no tener mi orgasmo dentro de ella. Y después de 3 semanas de tener sexo con ella casi día por medio (lo mejor era que me la traían a la casa y me pagaban por darle clases, pero a la vez saciaba mis necesidades sexuales), me pidió que quería sentir mi semen dentro de ella, le dije que eso era peligroso y podía quedar embarazada, pero me dice que probara con meterle mi pene por la cola y que alli tuviera un orgasmo dentro de ella.

Cuando conversamos eso, estábamos en la cama y la puse de costado y yo desde atrás, refregaba mi pene erecto sobre su cola en donde presioné varias veces, pero se salía. Allí le dije que se relajara, entonces cambié de posición, puse mi cabeza en su entrepiernas y luego empecé a hacerle oral y acariciando su clítoris Sandra no pudo evitar otro orgasmo y allí comencé a pasar mi lengua por su ano suave y lento. Con la ayuda de un dedo, empecé a dilatar y a medida que le metía un dedo, empecé a meter dos, al tiempo que con la lengua recorría toda la zona y al cabo de unos minutos nuevamente la acomodé de costado, pues era la única posición ya que sus piernas no tenían ningún movimiento y mientras le besaba su espalda y cuello, mi pene empezó a entrar en su ano, lentamente la sacaba un poquito y empujaba un poco más, Sandrita entre suspiros me decía:

- Me duele mucho, despacio, por favor, despacio

Y a pesar de todo ese dolor, en ningún momento me decía que lo sacara, si no que por el contrario, pedía más, así muy de a poco, casi a los 10 minutos sentí su ano apretándome la base del pene, la había penetrado completamente, cuando empecé a sacarla y meterla, hasta que sentía mi orgasmo muy próximo y se lo dije, pero Sandrita dijo:

- Quiero ese semen dentro de mi

Continué penetrándola, mi pene prácticamente se incrustó en su ano hasta la base, Sandra dió un fuerte grito, entre sollozos me decía que estaba bien y que no parara, así que poniendo mis manos en sus nalgas comencé a subirla y bajarla sobre mi pene. Pasaron unos 3 minutos en que mi pene entraba y salía de su culo y la puse frente a mi, nos abrazamos fuertemente y mientras nos mirábamos y le dije ahí venia mi orgasmo y un temblor recorrió mi cuerpo y solté sus nalgas dejando que su cuerpo cayera por completo sobre mi pene, Sandra tiró la cabeza hacia atrás y dió un suspiro justo en el momento en mi semen comenzaba a salir, ella me decía;

- Siento una sensación rara, tu leche está caliente dentro mío, siento que resbala dentro de mí.

Nos quedamos así hasta que mi pene fue recobrando su tamaño normal y en medio de besos, nos decíamos cosas dulces, realmente sentir su cuerpo pegado al mío era hermoso. Estuvimos unos minutos abrazados, ya ambos estábamos sudados, allí descansamos unos minutos, en donde dije que nos fuéramos a bañar juntos, allí lleve una banca a la ducha, la tomé en mis brazos y nos bañamos.

Después de esa ducha, fue el momento de conversar sinceramente entre nosotros y ella me dice que sabia que yo no me enamoraría de ella (por su condición de lisiada), pero si al menos quería disfrutar del sexo, de estar con un hombre y que la hiciera disfrutar. Alli me dice que terminando el año se iba a ir a Puerto Montt a trabajar con su papá (atendiendo un negocio) y que en ese momento solo le importaba tener sexo y disfrutar de ese placer y no enamorarse.

Tras esas palabras, nos abrazamos, quedamos en que seguiríamos teniendo sexo durante todo el tiempo que se pudiera, además de que ella empezaría a tomar pastillas y que el sexo sería nuestro secreto.

Y lo importante, académicamente no reprobó el año, si no que tuvo un buen promedio, ya que empezamos con el tema de recompensas al estudiar... si le iba mal, no le daría sexo y solo estudiaríamos. En la actualidad vive en el sur de Chile, estudió psicologia y esta casada con 2 hijos. Tenemos algún lazo de comunicación, pero más importante es que conservamos ese recuerdo con cariño, como nuestro gran secreto